El mejor bocadillo de Madrid (Fusión) se monta en Ponzano

El mejor plato del concurso Bocadillos de autor de Madrid Fusión es la Ventresca madurada. Así se llama el mejor bocadillo del certamen, que triunfó entre los seis aspirantes que participaron este lunes 28 de marzo. El ganador es, Máximo Benagues, un joven cocinero nacido en Cuenca hace 23 años, con una carrera de solo siete años desde la cocina, tres de ellos en la Neotaberna Santerra.

Este restaurante de la calle Ponzano prepara su plato que, según ha indicado, se trata de un guiño al País Vasco que ha podido honrar con su delicioso bocata de ventresca de atún rojo madurada en grasa de entrecot.

Su plato estrella surge como la combinación perfecta de un emparedado en lonchas de pan de cerveza, incluyendo un tartar de piquillos confitados, ajo, aceite, salsa de piparras encurtidas, mostaza antigua, queso cheddar ahumado, canónigos y cerveza. Una elaboración que le permite llegar al sabor del éxito en esta novena edición del concurso tras dejar madurar la ventresca con sal de mar durante 24 horas. Una vez envuelta en la grasa del entrecot, la deja colgada en una cámara entre dos y tres grados durante 15 días.

Como premio final, el creador de la receta ganadora ha recibido un cheque de 1.500 euros, mientras que el segundo clasificado, Alejandro Salcedo, y el tercero, Josemi Martínez Pilar, cerraron el concurso con un cheque de 300 euros cada uno.

El concurso de bocadillos de autor se ha consolidado como un esperado certamen por los profesionales de la hostelería. El galardón había recaído antes en ubicaciones madrileñas como Crab & Rabbit, de Félix Guerrero en el Restaurante Pedro Larumbe, además de otros rincones como la Escuela de Hostelería de Benahavís de Málaga con el Bocata de calamares con alioli en su tinta, de Raquel García.