Cuando este domingo Madrid superaba los 36ºC de calor en la estación meteorológica que la Agencia Estatal de Meteorología tiene en el Retiro, varios coches de la Policía Municipal de Madrid desalojaban a los madrileños y visitantes que intentaban huir del bochorno en el interior del parque. El motivo era el protocolo por condiciones climatológicas adversas del Ayuntamiento de Madrid, que obligaba al cierre.
El protocolo establece que con altas temperaturas y rachas de viento fuertes o moderadas, además de una excesiva sequedad del ambiente, se clausuran físicamente 10 parques históricos de Madrid (El Retiro, El Capricho, los jardines de Sabatini, la Rosaleda del parque del Oeste, Juan Carlos I, Juan Pablo II, Quinta de Fuente del Berro, Quinta de los Molinos, Quinta Torre Arias y el parque lineal del Manzanares) y se prohíbe el paso a otros dos espacios verdes sin vallar de la ciudad (Dehesa de la Villa y Parque del Oeste).
La aplicación de esta normativa, aprobada en junio de 2019 durante los últimos días del Gobierno de Carmena a raíz del fallecimiento de un niño en el Retiro, ha estado cuestionada durante la primera legislatura de Almeida. El alcalde se había negado hasta ahora a cambiarlo, pero este lunes se ha abierto por vez primera a revisar este protocolo, convocando al resto de grupos municipales (PSOE, Más Madrid y Vox) a una reunión en Cibeles para este martes.
“Nosotros vamos a poner todos los datos encima de la mesa (...) queremos que todos los grupos municipales hablen”, ha explicado el alcalde ante las críticas del enésimo cierre de este domingo, justo cuando los madrileños buscaban los parques como uno de los pocos refugios climáticos de la ciudad
“Está la seguridad de los madrileños en juego”, añadió antes de afirmar que había leído la propuesta que el PSOE ha lanzado hoy en redes sociales a través del concejal socialista Antonio Giraldo. “Me parece bastante razonable lo que dice”, ha adelantado Almeida.
“Es evidente que el protocolo actual no casa con la situación de emergencia climática y la necesidad de dar refugios climáticos en episodios de alto calor”, advertía el edil. “Adaptar nuestras ciudades a los cada vez más frecuentes y extremos episodios de calor requiere revisar protocolos, y esto a veces supone rectificar políticas que hasta ahora considerábamos correctas”, añadía.
Más Madrid también ha pedido la revisión explícita del protocolo, para ofrecer espacios frescos “a muchas familias que no tienen recursos ni acceso a aire acondicionado”. Por ello piden valorar alternativas al cierre total, “localizando las zonas de riesgo para restringir el acceso a todas estas áreas, por ejemplo”, ha reclamado el portavoz del partido, Eduardo Rubiño.
El nuevo edil, que se queja de la “inacción de Almeida durante cuatro años” para conseguir adaptar la ciudad “a la emergencia climática”, anuncia que reclamará este martes un plan ambicioso de adecuación de los espacios verdes, “para tener más sombras y más fuentes”.