El pasado 15 de febrero un informe municipal puso en peligro toda la operación para construir dos grandes aparcamientos municipales que el Real Madrid había pedido al Ayuntamiento al lado de su estadio. Lo emitió el área de Desarrollo Urbano, dirigida por Mariano Fuentes (Ciudadanos) a petición del área de Movilidad (Borja Carabante, PP) y su contenido relativo al polémico parking bajo la calle Padre Damián era muy crítico con toda la actuación en un entorno en el que el consistorio ya había constatado que no eran necesarios más espacios para el transporte privado.
El informe, firmado por un asesor del área y al que ha tenido acceso Somos Madrid, recordaba que en el año 2017 el área de Desarrollo Urbano Sostenible había elaborado un plan que constataba que en el área del Bernabéu existía “un excedente de aproximadamente 250 plazas de aparcamiento”, debido a que la zona azul se ocupa en un 65% de forma habitual. Añadía que en la zona existen 1.200 plazas en seis aparcamientos mixtos y otras 4.000 en cinco estacionamientos privados.
Por otro lado, apuntaba a “la necesidad de favorecer el transporte colectivo público y no incrementar los aparcamientos para el vehículo privado” en este entorno, recordando que el planeamiento actual había demostrado que “las condiciones actuales del entorno, ampliamente cubierto con numerosos elementos del transporte público y estratégicamente asistido por diferentes ejes viarios (...) minimizan las necesidades de aparcamiento”
Además, el texto explicaba que el plan de movilidad aprobado durante la anterior legislatura ordenaba que la planificación los días de partido debía estar basada en “reducir el número de vehículos como modo de acceso” y también “aumentar el número de desplazamientos en modos sostenibles”, algo que, según el informe municipal al que ha tenido acceso este periódico, “no parece compatible” con los dos aparcamientos con más de 2.000 plazas que plantea Almeida.
Por todo ello, el área de Desarrollo Urbano firmó un informe con unas conclusiones que aseguraban que “el nuevo aparcamiento subterráneo proyectado entra en contradicción con los argumentos de movilidad” respecto al planeamiento anterior, con el que presenta “incompatibilidad”, dice expresamente, a la vez que recomienda subsanarlo “mediante la tramitación del correspondiente Plan Especial que incorpore y habilite las condiciones normativas para acometer el nuevo proyecto”, un trámite mucho más largo que el seguido por el área de Movilidad del Ayuntamiento.
Carta del área de Obras y rectificación
El informe de Desarrollo Urbano sobre el aparcamiento de Padre Damián había sido solicitado por el área de Movilidad meses antes y le siguió otro al día siguiente con contenido similar, sobre el parking bajo el paseo de la Castellana, del que ya hablamos en este periódico hace unos días. Este último fue firmado, por un jefe de departamento un subdirector general y por el director general de Planeamiento, Javier Hernández Morales.
Los dos informes eran contestados solo un día después: el 17 de febrero el área de Obras (Paloma García Romero, PP) exigía desde su subdirección del Control de la Urbanización varias aclaraciones sobre ambos, en una escueta carta dirigida al área de Desarrollo Urbano a la que ha tenido acceso este periódico.
El área de Obras pide expresamente que se tenga en cuenta el estudio de viabilidad redactado por el Real Madrid y sus estudios de tráfico, no solo los proyectos técnicos para la construcción de los aparcamientos, elaborados por el Ayuntamiento a posteriori, a petición del club que preside Florentino Pérez. También exige que se valore ambos aparcamientos como un clúster urbano conjunto, “el área de influencia a la que atiende y los usos urbanos a los que sirve”.
Además, Obras reclama que se cite los incumplimientos concretos en el plan especial del Bernabéu y si se ve afectado alguno de los usos urbanísticos establecidos por la ordenación de dicho plan. “Por lo expuesto, se solicita la emisión de informe que aclare el contenido de estas observaciones y cuantas cuestiones se deriven del estudio de la documentación completa”, concluye la misiva.
El texto fue respondido en tiempo récord: solo tres días después, el pasado 20 de febrero, el área de Desarrollo Urbano emitía un informe aclaratorio rectificando todas las pegas al proyecto y dando luz verde a la construcción de los aparcamientos sin necesidad de un plan especial. “No se observa que los proyectos analizados (...) incumplan ninguna de las prescripciones establecidas” dice el texto firmado esta vez en solitario por el director general de Planeamiento, Javier Hernández.
El Ayuntamiento de Madrid descartó los dos primeros informes y los dejó fuera del expediente de los aparcamientos por considerarlos “extemporáneos”. Sí que incorporó el informe posterior aclaratorio al expediente oficial. La validez legal de la operación quedó confirmada el 3 de marzo, según las mismas fuentes, cuando un informe de la Oficina de Supervisión de Proyectos solicitado por el área de Movilidad daba por válidos otros dos informes favorables emitidos en septiembre de 2022 por este organismo, que depende del área de Obras. El consistorio reitera que este informe emitido en su día “es válido, en tiempo y forma”.
Tres retrasos, denuncia vecinal y 561 millones en juego
Los aparcamientos previstos por el Ayuntamiento de Madrid junto al estadio Santiago Bernabéu son dos: uno irá bajo la calle Padre Damián (con 617 plazas y un túnel extra de paso) y otro junto a la Castellana (1.299 plazas). Su explotación será por concesión de obra y el equipo de Almeida está pendiente de privatizar su gestión a una empresa durante los próximos 40 años.
Las fechas del concurso han ido variando durante las últimas semanas. Inicialmente estaba previsto que se pudieran abrir los sobres de ofertas para iniciar las adjudicaciones antes de un hipotético cambio de gobierno en el Ayuntamiento, pero tres retrasos han llevado hasta el próximo 15 de junio la fecha límite para recepcionar ofertas. Por el momento.
En el área de Movilidad no han aclarado el motivo de la ampliación de las fechas para recibir ofertas, aunque otras fuentes consultadas por Somos Madrid indican que puede deberse a los diferentes recursos interpuestos por los vecinos de la zona contra este concurso público, que han sido desestimados.
No es el único frente legal al que se enfrenta el proyecto, ya que la asociación vecinal creada por residentes y trabajadores en Padre Damián interpuso hace unos días un contencioso-administrativo en los juzgados por “irregularidades patentes y groseras”, según el texto al que tuvo acceso este medio.
El consistorio calcula que la concesionaria podrá facturar 561 millones de euros en los 40 años de concesión, principalmente gracias a comercializar las plazas de aparcamiento de rotación, aunque también al aparcamiento de buses, el alquiler de una plataforma logística y los eventos que organice sobre 20.000 metros cuadrados de plaza pública, que también será privatizada durante las cuatro décadas de concesión.