Las obras para soterrar la A-5 en Madrid arrancarán a finales de 2024, así como la cubrición de la M-30 en Ventas

El esperado proyecto para soterrar la A-5 en su entrada a Madrid arrancará en 2024. Lo ha confirmado el alcalde de Madrid, José Luis-Martínez Almeida, al compartir algunos detalles del que será su gran proyecto de la legislatura, durante la presentación de los presupuestos municipales para el año que viene.

Una partida de siete millones de euros recogida en las cuentas públicas servirá para iniciar los trabajos, avanzó durante la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno y en la que quedó confirmada una actuación que servirá para enterrar el Paseo de Extremadura con un modelo similar al de Madrid Río, con zonas estanciales, parque y juegos infantiles distribuidos a lo largo de los tres kilómetros y medio sobre el túnel, en su parte central. Por debajo, habrá tres carriles para el tráfico, uno de los cuales estará reservado al transporte público.

La cantidad dedicada a las obras el año que viene será la parte más pequeña del gasto total de unos 400 millones que prevé el consistorio en esta obra, la mayor de la legislatura. La licitación de las obras se adjudicará en 2024 y los trabajos comenzarán a finales del año que viene, ha detallado la delegada de Hacienda, Engracia Hidalgo. “Nos hemos cansado de esperar”, se ha quejado el alcalde con respecto a las negociaciones con el Gobierno para enterrar también la otra parte del paseo de Extremadura, la que corresponde a la Operación Campamento.

Somos Madrid adelantó hace meses que el coste de soterrar la A-5 se cifró en 409,7 millones de euros, según documentos de la posible licitación a los que tuvo acceso este periódico. La construcción se dividirá en tres lotes, dos para la construcción del túnel en sí y otro más para la urbanización de la superficie, en la que se levantaría el paseo urbano y se pondría fin a la autovía urbana que quieren hacer desaparecer los vecinos.

El primer lote constructivo, que bajaría al subsuelo después de la avenida del Padre Piquer y llegaría hasta Batán, es de 1,72 kilómetros y formará una nueva glorieta en la Avenida de los Poblados. Se tardaría en construir 21 meses. El segundo lote se sitúa entre Batán y la avenida de Portugal y consta de 1,48 kilómetros para conectar el nuevo túnel con el existente junto al paseo de Extremadura. Se calculan 25 meses para esta parte.

Como para el proyecto de urbanización en superficie se estiman 15 meses más de ejecución y si los dos primeros lotes se ejecutaran a la vez, las obras tardarían no menos de 40 meses en finalizar, según el proyecto consultado por Somos Madrid.

Además, el consistorio también ha confirmado que iniciará los trabajos para soterrar la M-30 a la altura de Ventas, otra de sus promesas electorales, que ha valorado en 60 millones de euros.

No se iniciará, sin embargo, las obras de soterramiento de la Castellana Norte. El alcalde ha indicado que a lo largo de 2024 se redactará el proyecto de ejecución, para desarrollarlo a lo largo del resto de la legislatura.

En cuanto al resto de obras de gran calado que arrancarán el año que viene, está presupuestada la remodelación de Santa María de la Cabeza en el lado de Carabanchel, el desdoblamiento del Puente de Eduardo Barreiros o la mejora de plazas como las de Jacinto Benavente, Tirso de Molina y Dalí, entre otros proyectos.