Sigue el gafe del Canal de Isabel II en el renovado Parque Santander, inaugurado por la presidenta regional Díaz Ayuso justo antes de las elecciones de hace un año. Si hace unos meses se secaban las 6.600 plantas que formaban parte de un jardín vertical, ahora ha sido el césped de su gran pradera el que no ha reverdecido con la primavera y que acabado siendo desmantelado.
Según pudo comprobar in situ el periódico Somos Chamberí, el Canal ha retirado todo el césped que plantó hace un año para la inauguración del parque. Una variedad de grama que fue elegida por sus jardineros siguiendo “criterios de sostenibilidad y eficiencia” y que ha acabado por no ser retirada después de permanecer amarilla durante todo el invierno.
Este color despertó dudas entre los usuarios del parque hace unos meses, paseantes que daban por hecho que se había secado. Pero fuentes del Canal explicaron entonces que este tipo de césped adquiría esa tonalidad durante los meses de frío: “En periodos de bajas temperaturas, entra en latencia, perdiendo su color y limitando su crecimiento”, apuntaron desde la empresa pública de la Comunidad de Madrid, a la vez que justificaban su elección en el “menor consumo de agua”.
Cinco meses después de estas explicaciones, varios sacos de obra con tierra rodean estos días la antigua pradera del Parque Santander, convertida ahora en un espacio marrón de más de 4.000 metros cuadrados. Las mismas fuentes del Canal explican que se trata de “trabajos de mantenimiento y mejora”, que incluyen sembrar semillas de otra variedad de césped “de características similares” a la que fue retirada. El motivo del desmantelamiento de la anterior no ha sido comunicado.
Este es el segundo incidente relacionado con el riego que tiene lugar en la mayor zona verde de Chamberí, situada sobre un depósito de cientos de miles de metros cúbicos de agua, en un parque que la Comunidad de Madrid se apresuró en abrir para mayo de 2023, coincidiendo con las elecciones municipales y autonómicas.
El primero tuvo lugar en agosto del año pasado, cuando flores, aromáticas y otras plantas variadas que tapizaban los 90 metros de su jardín vertical estrella acabaron secas por completo debido a un fallo en el riego y a las altas temperaturas registradas durante el problema mecánico. Un vídeo grabado por Somos Chamberí mostró entonces el alcance del apocalipsis herbáceo.
Las 6.600 plantas secas fueron sustituidas en septiembre y de momento continúan creciendo. No ha tenido tanta suerte el césped cercano, situado en la zona donde estaba el antiguo campo de tiro de golf, levantado por Esperanza Aguirre y que fue demolido al ser declarado ilegal por la justicia.