“¡Pagamos impuestos, queremos luz!” era el grito de guerra anoche en la calle Gaztambide. Decenas de vecinos se concentraban para reclamar una mejor iluminación de la calle, por la que afirman caminar “en penumbra” cada vez que cae el sol. Habían sido convocados por la asociación Chamberí se defiende, que repartían velas y portaban carteles con el lema “Carmena no ilumina”.
La luz de estas velas destacaba en este tramo de la calle, a la altura del número 75, donde los participantes en la protesta consideraban que existe cierta “inseguridad” por la ausencia de iluminación suficiente. En la otra acera, una hilera de farolas más propias de otras décadas -o “de carretera”, como las califican los vecinos- arrojaban la escasa luz que les permitían las hojas de los árboles que tienen delante.
“Y cuando cierran las tiendas todo es todavía más oscuro”, explicaba una de las convocantes de la protesta a Somos Chamberí, quien indicaba que los vecinos tienen a veces dificultades para ver por dónde pisan. Además, denunciaba que la ausencia de luz aumenta la presencia de colectivos como el de los cartoneros, que sustraen papel de los contenedores de reciclado. Los manifestantes exigían además que se cumplieran los diferentes acuerdos a los que se ha dado luz verde desde la Junta de Chamberí.
La deficiente iluminación del distrito ha sido un tema recurrente en los plenos de esta Junta a lo largo de 2017. Tanto PSOE como Ciudadanos han llevado a votación -y conseguido que se aprobaran- proposiciones para revisar las calles que necesitan más luz e instalar nuevas farolas. No solo en Gaztambide, también en Vallehermoso o en Bretón de los Herreros. “El problema se extiende a todas las calles del distrito que tienen farolas altas en un solo lado de la calle, tapadas por árboles”, apuntaba otro miembro de Chamberí se defiende.
La última vez que se habló de este problema fue en el pleno de diciembre, cuando salió adelante una propuesta para alumbrar mejor el tramo en el que tuvo lugar la concentración de este miércoles. “Lo ideal a nuestro juicio sería la instalación de lámparas bajas tipo Fernandinas”, proponía entonces Ciudadanos.
En la concentración estuvieron presentes varios concejales de la oposición, entre ellos Pedro Corral (PP) y el diputado autonómico González Taboada, del mismo partido. Corral hacía hincapié en que el distrito necesitaba “inversiones en pequeñas cosas, en lugar de convertirse en un laboratorio de la movilidad”, explicaba a Somos Chamberí. “Es necesario que las propuestas no se queden en un cajón”, recalcaba. Por Ciudadanos acudió el portavoz en el distrito, Luis Baeza-Rojano y la concejala Silvia Saavedra, quien además de apoyar a los vecinos, anunció que su partido está analizando las zonas oscuras de toda la ciudad para hacer una propuesta concreta al Consistorio de qué lugares necesitan mejor iluminación.
De momento el Ayuntamiento no ha dado detalles de cómo va a cumplir los acuerdos que se aprobaron. Aunque la última semana del año aprobó una partida presupuestaria especial, con cargo a las Inversiones Financieramente Sostenibles, que serviría para renovar el alumbrado en varios distritos de Madrid, entre ellos el de Chamberí. Lo hará con luces LED, de menor consumo y mejor rendimiento. Pero aún ha de detallar las calles que se beneficiarán de esta medida.