Así fue Salesas Village 2015

El viernes 27 el sábado 28 de marzo la Plaza de las Salesas vistió sus galas más verbeneras y se transformó en toda una pequeña ciudad en miniatura dentro del barrio de Justicia gracias a Salesas Village [The Festival]. Dos días en los que vecinos y visitantes pudieron conocer los productos y servicios de varios comercios de la zona y disfrutar de descuentos y diferentes talleres, que no sólo encantaron a los más pequeños sino también a los adultos.

Con un tiempo de lo más primaveral, muchos fueron los curiosos que se acercaron hasta la Plaza de las Salesas para conocer qué tienen que ofrecer las tiendas del barrio y hacer algunas compras en alguno de los puestos que se instalaron para la ocasión. Los más activos pudieron optar por apuntarse en las actividades gratuitas tutorizadas en las que La Magdalena de Proust (C/ Regueros 8), Ecomanía (C/ Belén, 4), Slowroom (Plaza de las Salesas, 2) y Lomography (C/ Argensola, 1) compartieron parte de sus conocimientos profesionales.

Rompieron el fuego el Taller de hacer trufas de La Magdalena de Proust y el Taller de cestería con papel de periódico de Ecomanía la tarde del viernes, en los que no cabía ni un alfiler. El sábado por la mañana comenzamos con el Taller de reparación de bicicletas de Slowroom, al que le siguió una de las actividades con más acogida entre el público: el Taller Revela con tus manos de Lomography Spain, en el que niños y no tan niños pudieron experimentar con sus manos en las técnicas de revelado analógico.

Tan entregados estaban los alumnos de esta actividad que el Taller de flores con cartón de Ecomanía comenzó con algo de retraso sobre el horario programado, aunque a nadie le importó tener que esperar para aprender a hacer fantásticas creaciones vegetales con cartón rizado. Quienes se animaron a apuntarse a él se llevaron a casa no sólo los fundamentos de esta técnica, sino preciosas flores que no necesitan riego para brillar en su máximo esplendor.

A primera hora de la tarde, nuestros vecinos de La Magdalena de Proust volvieron a darnos una vez más una lección gastronómica de lo más resultona, fácil, nutritiva y deliciosa. Se trata de un pudding de chía, ese súperalimento con tantísimas propiedades al que muy pocos sabemos darle uso y que entusiasmó a los paladares infantiles, que se lo comían a cucharadas sin mezclar.

¿Los ingredientes? Semillas de chía remojadas media hora antes en leche vegetal (de soja, avena, almendras... al gusto del consumidor), una buena mermelada casera que se usará como base del plato y unos cereales para darle un toque crujiente. Luego se le puede añadir también un chorrito de chocolate para hacerlo aún más apetecible para los niños, aunque es totalmente prescindible.

Tomamos la mermelada (en este caso se usó de kiwi y, aunque admite cualquier fruta, recomiendan hacerlo con mermelada de frutos rojos o de textura y aporte calóricos similares para que quede más rico y sano) y la depositamos en el fondo del vaso o el recipiente en el que vayamos a comer el pudding. Encima se pone otra capa de chía y, por último, se añaden los cereales. Los más chocolateros también pueden ponerle un poco de chocolate líquido. ¡Y listo para comer!

De la mano de Lara, de Ecomanía, aprendimos a última hora de la tarde del sábado a realizar unas originales esculturas con libros reciclados. Una original manera de darle una nueva oportunidad a ese libro que ya no lees y que puede convertirse en un estupendo adorno. ¿No te lo crees? Pues te garantizamos que se pueden hacer auténticas maravillas una vez que se dominan las técnicas básicas, que era el objetivo del taller: aprender por dónde empezar.

Lo que pocos sabían cuando se apuntaron al taller es que el proceso de construcción de estos libros-escultura obligaría a los asistentes a estrujarse las neuronas haciendo números para saber el número de dobleces que tenían que hacerle al papel y a partir de dónde había que comenzar a doblar. Una actividad no apta para niños pequeños, pero que disfrutaron –y mucho– los alumnos y alumnas más veteranas, aunque hay que destacar la facilidad de los más jóvenes a la hora de aprehender los conocimientos y doblar las hojas a la perfección.

Si no pudiste acercarte hasta Salesas Village para aprender a hacer esculturas con libros, no te preocupes, porque Lara nos ha comentado que en Ecomanía van a organizar próximamente nuevos talleres para aprender esta fascinante técnica. Quienes estén interesados pueden ponerse en contacto con ella a través del correo electrónico hibouxhiboux@hotmail.com para que les de todos los detalles y les informe de las fechas.

Nosotros todavía tenemos como tarea pendiente meterle mano al libro que muy amablemente nos regaló para que nos animemos a lanzarnos al fascinante mundo de las esculturas con libros. Prometo que, en cuanto me ponga manos a la obra, compartiré con vosotros el resultado. Y si no me queda perfecto del todo, no hay problema, que con volver a desdoblar las páginas el lienzo queda de nuevo en blanco para un nuevo intento.