Las obras de la Audiencia Nacional que afectan a la Plaza de la Villa de París continúan preocupando a los vecinos de Chueca y Salesas. Según denuncia la Asociación de Vecinos de Chueca (AVChueca), «estamos asistiendo impotentes a la degradación y destrucción de uno de los rincones con mayor valor urbano, cultural y paisajístico del centro de Madrid».
«Era un construcción moderna, al contrario de la mayoría de los que conforman la plaza que son de fines de siglo XIX y principios del XX, esta edificación mantenía la altura de los edificios adyacentes y se integraba discretamente en el conjunto armónico de edificios históricos de tres de los lados de la plaza (el cuarto flanco lo ocupa la mole del Centro Colón que, aunque tiene un impacto visual enorme, pertenece al Paseo de Recoletos)», explican desde AVChueca.
El principal problema es que, tal y como apuntábamos hace unos meses, el proyecto inicial se ha modificado y supera, con creces, la altura autorizada: «dos plantas más un torreón que equivale a una planta más, desvirtuando de forma irreversible este rincón del Madrid histórico», apuntan. El edificio rehabilitado tendrá una superficie de 10.961 m² y en el subsuelo habrá 3.839 más, lo que supone un total de 14.800 m² (frente a los 9.924,07 m² del proyecto original).
Pero no se trata de un simple problema estético que rompe con la armonía arquitectónica del entorno monumental, que está en trámites de convertirse en espacio protegido por la Comunidad de Madrid. El prometido aparcamiento para residentes también va a ver mermado su espacio, en favor de nuevas salas de vistas para la Audiencia Nacional, según se acordó en el Consejo de Ministros del 8 de noviembre de 2013.
Unas modificaciones que, según apunta AVChueca, se están llevando en el más absoluto secretismo: «las administraciones implicadas parecen poco interesadas en dar detalles. Se habla de “mejoras”y “peatonalización” de la plaza, pero en realidad como la experiencia nos demuestra, cualquier actuación estará supeditada a las necesidades de la sede judicial», denuncian.
Sorprende el repentino cambio de opinión de la Comisión Local de Patrimonio Histórico de Madrid (CIPHAM), que se había opuesto anteriormente a dichas obras y que, con Alberto Ruiz Gallardón (vecino del barrio y antiguo alcalde de Madrid) ya como Ministro de Justicia, no haya tenido reparos en dar su autorización para unas obras aún más lesivas que el proyecto inicial para el Patrimonio y los vecinos.
Entre las principales consecuencias negativas que apunta esta asociación vecinal se encontrarían:
- la eliminación de plazas de aparcamiento de residentes
- el aumento del tráfico en una zona que tiene como objetivo convertirse en APR (Área de Prioridad Residencial)
- la eliminación de árboles y superficie vegetal
- la pavimentación de zonas que ahora utilizan los perros y los niños del barrio
- la restricciones a la movilidad para los vecinos
Una larga lucha vecinal que comenzó en 1976
En el año 1976 la situación de la Plaza de la Villa de París era muy parecida a la actual. Las altas esferas habían proyectado el actual aparcamiento subterráneo y su construcción suponía destruir un jardín histórico y uno de los pocos espacios verdes del distrito Centro. Vecinos y autoridades en conservación del Patrimonio decidieron entonces aunar fuerzas para protegerla.
Una reclamación vecinal de la que se hicieron eco los medios de la época como el suplemento Blanco y Negro de ABC y que sirvió para que el Ayuntamiento se comprometiera a utilizar para su construcción el sistema en mina, es decir, por medio de un túnel que partiera de lugar distinto al de la plaza y permitiera la conservación total de los árboles y, al mismo tiempo, posibilitara a los vecinos disfrutar de ese espacio durante las obras.
«Era 1976, dos años antes de que se aprobase la Constitución y nuestro país se convirtiera en un Estado de Derecho. Han pasado 38 años y los vecinos constatamos que las formas de participación ciudadana en la toma de decisiones han cambiado pero los resultados de nuestra participación no», lamentan desde AVChueca.
A finales de la primavera de 1977 iniciaron los trabajos y lo acordado quedó en agua de borrajas: la construcción fue a cielo abierto, por remoción del suelo y subsuelo del mismo parque, y gran parte de la superficie vegetal original fue destruida y nunca más recuperada.
Una llamada a la movilización
«Lo que se va a cometer es, a todas luces, una atrocidad urbanística en aras del “interés público”, o sea, del interés del Ministro de turno si los ciudadanos no lo impedimos haciendo uso de todas nuestra fuerza», denuncian desde la asociación, y llaman a los vecinos de Chueca y Salesas a la movilización.
Para ello, además de crear el grupo abierto en Facebook “Salvemos Villa de París”, proponen enviar al Ayuntamiento de Madrid una solicitud telemática de información sobre las actuaciones concretas que se van a realizar en la plaza y facilitan un modelo con un texto tipo para quienes quieran sumarse a su iniciativa:
Carlos Barajas