“Sin libros no hay vida”, puede leerse en los perfiles de Twitter o Instagram de la librería Nakama. Ahora a este icónico establecimiento le tocará justamente eso, revivir, después de perder “en torno a un 80% de la mercancía” en una repentina inundación catastrófica.
Rafael Soto, uno de los dueños de la librería, explica lo sucedido en declaraciones a Somos Chueca: “En el piso de arriba estaban haciendo una obra, se ha producido una avería y se ha inundado todo a lo bestia”. Ahora temen además los posibles daños en el local, con vigas de madera que quizás deban sustituir “por el peligro de que se pudran”. El suelo, de tarima, deberán cambiarlo. Lo mismo sucede con el techo, abierto y repleto de goteras.
El copropietario de Nakama, junto a su socia Miren, cuenta con pesar que del material expuesto solo se han salvado “cuatro estanterías y un par de mesas”. Por si fuera poco, de momento no pueden acudir a “rescatarlos”, ya que deben esperar a que un perito evalúe todos los daños.
Eso sí, en pocas horas ya hay motivos para la esperanza. Colgaron un mensaje en redes para informar del cierre, y se han encontrado con cientos de respuestas en las que la gente pregunta cómo puede colaborar. “Hoy ha sido todo achicar agua”, dice Rafa, pero quizá con un poco de suerte y de ayuda mañana Nakama ya pueda empezar a vislumbrar su nueva vida.