A las 19 horas, en la plaza de Lavapiés y convocada por el grupo 8M Lavapiés, una concentración de condena por la muerte de una niña a manos de su padre despedía 2021 en el barrio de Embajadores. La noticia de los hechos, ocurridos la noche del pasado jueves en la calle del Amparo, ha revolucionado el último día del año en el vecindario.
La concentración de esta tarde también ha servido para “acompañar en el dolor” a la madre y a los familiares de la pequeña de tres años, según los convocantes. La familia, incluido el padre, eran muy conocidos en la zona.
Violencia vicaria
Según fuentes de la investigación, el hombre habría matado a su hija para, seguidamente, quitarse él mismo la vida. La alarma la dio la madre, de quien el presunto asesino, francés de 47 años, estaba separada. Al no poder contactar con la menor y comprobar que en el domicilio donde sucedieron los hechos había luz, la mujer avisó a las autoridades y fueron agentes de la Policía Nacional, al cargo de la investigación, quienes encontraron los dos cuerpos sin vida.
El equipo de psicólogos del Summa 112 atendió a la madre de la menor fallecida y a la abuela de la niña, que se encontraban en el lugar de los hechos cuando se descubrió lo que había ocurrido, según ha informado Emergencias Madrid y recoge la agencia de noticias EFE.
Estaríamos ante un nuevo caso de violencia vicaria, que en 2021 se ha cobrado la vida de siete menores. La violencia vicaria es aquella que tiene por fin dañar a la mujer a través de sus seres queridos, especialmente de sus hijos, y cuyo ejemplo más extremo resulta el asesinato de estos últimos.