La mañana del martes 15 de marzo será recordada por muchos madrileños como la que descubrieron una ciudad naranja al mirar por su ventana. El polvo sahariano esparcido por buena parte de la península.
Todos los espacios al aire libre de la ciudad se han cubierto de una fina capa de arena, dotando a las calles de un todo desértico, que algunos ciudadanos se han apresurado a captar con sus cámaras y a compartir las imágenes en redes sociales. Lugares muy reconocibles como las torres de La Castellana amanecían así:
También el Palacio Real y el entorno de la Plaza de Oriente, muy expuesto al viento, presentaba tonos anaranjados en la mañana de este martes.
El horizonte de la región es hoy en general es anaranjado. Solo hay que subir a un sitio alto para comprobarlo. Las siguientes vistas están tomadas desde la glorieta Ruiz Jiménez (San Bernardo) por Luisa, una lectora de Somos Madrid.
Algunos de los elementos que más frecuentemente han sido fotografiados son los coches. El polvo se ha acumulado sobre sus capós lo que, unido a la tímida lluvia caída de madrugada sobre la capital, ha dejado imágenes como estas:
Aunque se estima que el episodio de calima siga activo durante todo el día en Madrid y también durante la jornada del miércoles, algunas instituciones se afanaban este martes en retirar la arenilla de sus entornos.
La imagen anterior pertenece al entorno de la Puerta del Sol. La siguiente es del Congreso de los Diputados.
El polvo sahariano ha subido hasta las cumbres más elevadas de la Comunidad de Madrid, donde la nieve caída durante las jornadas anteriores se ha teñido de marrón.