Quizás no te des cuenta, pero cada día que te levantas estás generando un mar de datos: desde que enciendes la luz de tu cuarto o abres el grifo de la ducha hasta que apagas el móvil antes de acostarte estás enviando información que, gracias -o por culpa de- la era digital queda almacenada al instante, junto con las acciones de millones de personas. Cualquier intermediación técnica que ejecutes es susceptible hoy en día de ser recopilada, medida y utilizada en un mar gigantesco de datos que circula cada día a la velocidad de la luz. O de la fibra óptica.
Este fenómeno global es lo que analiza Big Bang Data, la exposición que ocupa la Fundación Telefónica de Madrid del 14 de marzo al 24 de mayo y que intenta explicar en diez bloques temáticos la manera en la que toda esta explosión de datos diaria (solo en el año 2007 se generó tanta información como en el resto de la historia de la humanidad) puede aprovecharse para conocernos mejor como sociedad, además de combinar instalaciones y proyectos artísticos, documentación histórica, entrevistas, documentos audiovisuales y prototipos tecnológicos.
En Big Bang Data, una muestra producida por el CCCB y que ya pasó por Barcelona, podrás comprobar la generación de datos en tiempo real, a través de varios proyectos de visualización que muestran por qué lugares se mueve la gente cuando sale de noche por Madrid o el recorrido de los turistas chinos por sus calles desde que desembarcan en el aeropuerto de Barajas.
Además, tres piezas artísticas creadas para la ocasión (de las 70 que componen la muestra) abordan diferentes implicaciones de la irrupción de este fantástico volumen de datos: la videoinstalación Internet Machine, de Timo Arnall, te mete de lleno en los aspectos físicos de los centros de datos; Winning Formula (Near Future) descubre cómo el fútbol profesional analiza y utiliza la información para modificar su táctica. Aunque la pieza que más utilidad saque el visitante de la muestra puede que sea la publicación Anonimízate. Manual de protección electrónica, con un buen número de recomendaciones para conseguir la máxima privacidad en un entorno en el que todo lo que generamos se almacena de forma digital.
Charlas para mayores, talleres para pequeños
La muestra viene acompañada, como suele ser habitual en la Fundación Telefónica, de un buen número de actividades paralelas. Lo más destacado son los talleres destinados principalmente al público infantil y juvenil, que les enseñarán a mapear la Gran Vía, geolocalizarse, construir sensores sobre su propio cuerpo o experimentar la ciberconectividad a través de expresiones plásticas. Además, habrá un taller específico para educadores.
El público adulto podrá asistir además a tres jornadas temáticas (una cada mes) sobre el Big Data y el internet de las cosas, en las que participarán diferentes expertos del sector. Todas las actividades son gratuitas.