El Ayuntamiento abre expediente a 63 alojamientos turísticos ilegales del Centro

La impunidad de los alojamientos turísticos ilegales que operan en el centro de Madrid ha sido clara y notoria durante los últimos años. Pero algo está empezando a cambiar: el Ayuntamiento acaba de anunciar las primeras inspecciones y procedimientos de sanción para decenas de apartamentos y viviendas turísticas que funcionan sin licencia en la capital.

En total, los técnicos municipales han encontrado 63 alojamientos turísticos fuera de la legalidad en el distrito Centro, 47 de ellos son apartamentos y 16 viviendas turísticas. Lo han hecho durante las 106 inspecciones efectuadas en las últimas semanas, después de que el Ayuntamiento anunciara que establecía una moratoria a las licencias turísticas en Madrid y que iba a comenzar a inspeccionar en busca de viviendas ilegales de este tipo, dentro de sus acciones contra la turistificación.

El dato ha sido ofrecido por la portavoz municipal, Rita Maestre, durante la rueda de prensa posterior a la junta de Gobierno. También ha comunicado que el expediente sobre todos los casos se encuentra en un estadio inicial llamado trámite de audiencia previo al cese de actividad, que tendrá lugar al final del proceso. Los alojamientos están ubicados en los siguientes edificios:

  • C/ Ventura de la Vega 10
  • Costanilla de los Desamparados 4
  • C/ Carretas 25
  • C/ Santa María 36
  • C/ Nuñez de Arce 9
  • C/ Calvario 6
  • C/ Abades nº3

Además, sobre otros 43 alojamientos se ha solicitado información complementaria a la Comunidad de Madrid, debido a que aún no se ha comprobado que allí se ejerza la actividad ilegal pero se tiene constacia de ello. Son los siguientes, entre los que se encuentran los Home Art Apartments de la Corredera, que forman parte de los seis edificios de Malasaña con uso turístico sobre suelo residencial. Los inspeccionados por el Ayuntamiento son estos:

  • C/ Ventura de la Vega 13
  • C/ Nuñez de Arce 7
  • Corredera Baja de San Pablo 33
  • C/ Abades 3

Todas las inspecciones tuvieron lugar durante los meses de diciembre y enero y han venido motivadas por las denuncias que las asociaciones de vecinos hicieron al Ayuntamiento de Madrid. Estos procedimientos se unen a los ya iniciados durante los años 2015 y 2016 en edificios de Gran Vía, Atocha o la calle Príncipe, que ahora se reactivan gracias a las nuevas instrucciones en materia de control urbanístico que sigue el consistorio.

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