Luz verde a las obras de renovación de la Plaza del Dos de Mayo. El Ayuntamiento se encuentra en plena licitación del proyecto, anunciado hace meses y que servirá para dar un “lavado de cara” del espacio público más icónico de Malasaña que no cambiará ninguno de sus elementos característicos ni, a grandes rasgos, la actual distribución del espacio.
Serán renovados por completo todos los suelos de la plaza, así como los muros de ladrillo que rodean el foso, donde se instalará un revestimiento de granito que será, posiblemente, la actuación que más llamará la atención después de la reforma. Además, se rehabilitarán los bancos de granito adosados a los muros y se renovará el mobiliario urbano de todo el entorno, bancos, papeleras y vallas incluidas. Todo ello según los planos del proyecto a los que ha tenido acceso Somos Malasaña.
Las obras también plantean una mejora del ajardinamiento existente y que se degrada continuamente por el fácil acceso e intenso uso de la plaza. Para que aguanten más se propone la plantación del especies arbustivas, que impidan el paso de personas a esta zona: lavandas, romeros, salvias y santolinas poblarán los actuales espacios verdes del Dos de Mayo. Las zonas con pavimento de tierra serán vaciadas y mantendrán su actual aspecto terrizo, pero con otra composición que evite la aparición de charcos y barro. Además, se retirará la actual fuente y se colocará otra accesible y con bebedero específico para perros.
Con esta actuación, la Junta de Centro, responsable de las obras, busca “la recuperación de un espacio actualmente degradado por el estado de conservación de sus pavimentos, jardinería y mobiliario urbano, en el que se busca crear un espacio más atractivo para los usuarios a la vez de potenciar la accesibilidad peatonal”, reza el proyecto para la plaza. El consistorio achaca la degradación al “trasiego de gente y el mal uso de las áreas e instalaciones”, con “rotura de pavimentos, desconchados y pinturas en los revestimientos de los muros, con problemas de higiene en las zonas ajardinadas y parterres, problemas de accesibilidad en zonas estanciales y deterioro del mobiliario urbano”.
Las obras, que se licitan junto a la reforma de la plaza de Lavapiés, tienen un presupuesto de 198.813 euros, durarán tres meses y todavía están en proceso de recepción de ofertas, por lo que podrían tener lugar -vistos los plazos de ejecución de este tipo de proyectos- a lo largo del verano. En la plaza tienen lugar actualmente otras obras, las de la reforma de la antigua Casa del Cura para su cesión a entidades vecinales, y recientemente se cambió uno de los parques infantiles más deteriorados.