Desde este lunes, la estación de Sol está llena de estímulos visuales en movimiento. Los viajeros que entran y salen de esta parada de Metro de Madrid son asaltados por los mensajes publicitarios de decenas de pantallas instaladas en vestíbulos y andenes. “El futuro de la comunicación ha llegado”, muestran en uno de sus anuncios.
Las pantallas son parte de las 500 instalaciones que Metro va a desplegar por las estaciones más concurridas de su red. Además de Sol, estarán presentes en Gran Vía, Nuevos Ministerios, Moncloa, Plaza de España, Plaza de Castilla, Gregorio Marañón, Callao, Atocha o Cuatro Caminos, entre otras. La compañía asegura en nota de prensa que “aportan una imagen vanguardista” a sus instalaciones.
Las instalación de pantallas forma parte del nuevo acuerdo de explotación publicitaria firmado por la Comunidad de Madrid y JCDecaux, una de las principales empresas del sector. Por este contrato, el suburbano madrileño le cede toda la gestión publicitaria a cambio de instalar estos nuevos soportes y el pago de 10,5 millones de euros al año.
Metro de Madrid asegura que la instalación de todos estos soportes publicitarios lo convierten en “el más digitalizado de Europa y en el primer espacio publicitario data-driven de España”. “En los próximos años estas imágenes futuristas se irán consolidando”, asegura el Gobierno regional en un comunicado.
Pese a la visión innovadora que quiere transmitir el Gobierno de Ayuso por la instalación de pantallas, la aparición de los anuncios ha empezado a generar críticas entre los usuarios de la red, expuestos ahora a una mayor presencia de la publicidad.