Pesa 1.500 kilos y mide 18 metros de altura. Llegó esta noche de la provincia de Gerona para formar parte de la decoración navideña de la capital, cuando se rodee de 1.800 metros de cordones luminosos, 800 bolas y 200 caramelos. En su base, seis paquetes de regalo de más de un metro completarán una de las estampas indispensables de las fechas festivas.
El abeto será iluminado el próximo viernes 26 de noviembre, día elegido por el Ayuntamiento para el encendido navideño de Madrid, que tendrá lugar en este punto. Presidirá también la inauguración de la nueva Plaza de España, que se abrirá al público solo unos días antes, el 22 de noviembre.
El abeto es de la especie caucasiana Abies Nordmanniana, y según el Ayuntamiento de Madrid cuenta con la máxima certificación MPS Sustainable Quality, asociación internacional que controla el cultivo vegetal en más de 55 países de todo el mundo ha venido país. El ejemplar que se ha instalado en la plaza de España es uno de los 50.000 ejemplares que cada año bajo planta la empresa suministradora.
El consistorio asegura que mantener el cultivo de abetos de Navidad naturales fomenta que el monte esté trabajado y cuidado, con lo que se evitan la deforestación, el abandono de los bosques, los incendios y la desaparición de las poblaciones que trabajan la tierra. Más Madrid ha criticado la decisión municipal de comprar un árbol sin cepellón, que no puede ser replantado al final de las fiestas: “Se lanza un mensaje equivocado”, dice su concejal José Luis Nieto.