Lo que parece es que la carrera olímpica acaba de empezar de nuevo en Madrid, aunque esta vez los primeros pasos van a trompicones. La vicealcaldesa de la ciudad, Begoña Villacís, se apresuró este martes por la tarde a avanzar la candidatura para los Juegos Olímpicos de 2036 en una entrevista en Cadena Ser, lo que fue negado desde Alcaldía unos minutos después. Pero lejos de amilanarse, Villacís confirmó las intenciones municipales en varias entrevistas nocturnas más y lo ha refrendado este miércoles en su primera comparecencia ante los medios. Mientras tanto, el alcalde aseguraba este miércoles que coincide con ella en que “podría presentarse una candidatura, pero en estos momentos no se ha tomado la decisión” y atribuía su anuncio al “deseo, la ilusión y las ganas” de un sueño “compartido”, aunque señalaba que el consejo de gobierno si había hecho “alguna gestión” para “testar y valorar la posibilidad” de “elaborar una nueva candidatura olímpica”.
“Yo lo que quiero es que Madrid sea sede olímpica y es por lo que voy a pelear”, ha puntualizado Villacis después de inaugurar unas jornadas municipales sobre terrazas de hostelería. “Soy madrileña, lo llevo deseando toda la vida y creo que tenemos una oportunidad fantástica”, ha afirmado antes de admitir que no había llamado al alcalde para aclarar el encontronazo del martes: “Ahora hablaremos, siempre resolvemos bien las cosas”, ha asegurado. “Es algo que no se aleja de lo que hemos dicho tanto el alcalde como yo en reiteradas ocasiones: Madrid quiere ser sede olímpica, creemos que hay una deuda a este respecto”.
Por su parte, Almeida señalaba desde el zoo de Madrid que “no se puede anunciar una candidatura sin que el resto de grupos municipales lo sepan, sin que se haya contactado con el Gobierno de España, de la Comunidad o sin acuerdo con el Comité Olímpico Español (COE)” porque “no se pueden generar falsas expectativas o generar otra decepción para los madrileños después de las tres candidaturas fallidas” de 2012, 2016 y 2020. “Es imprescindible que el equipo de gobierno lo apruebe y que haya un enorme consenso político y social” al tratarse de una “decisión de país”, ha señalado.
Tras el comunicado de este martes en el que la Alcaldía desmentía “que Madrid esté en estos momentos aspirando a presentarse a los Juegos Olímpicos de 2036”, el alcalde ha insistido apenas 15 horas después en que la decisión no está tomada, pero si ha reconocido que ha “mantenido contactos, obviamente, con el COE” y que también han “indagado y hecho alguna gestión” para “testar y valorar la posibilidad” de “elaborar una nueva candidatura olímpica” de cara a 2036 o más adelante.
Almeida ha dicho también que, desde el inicio de la legislatura, “no solo la concejalía de Deportes, sino el equipo de Gobierno en su conjunto” ha venido trabajando para “sentar las bases, en su caso (de una candidatura)” y por esto están “atrayendo los grandes eventos internacionales”, se ha trabajado “en la capital mundial del deporte” y se está “invirtiendo más de 60 millones de euros en grandes instalaciones deportivas”. Lo han hecho, ha explicado, “porque todo el equipo de gobierno sabe que es un sueño y una aspiración” y que hay “una deuda con la ciudadanía de Madrid”, pero ha abogado por hacerlo “desde la unidad”. “Si los madrileños perciben que no hay unidad en el gobierno, es muy difícil lanzar la candidatura”, ha insistido.
“Esto es un gobierno de coalición, nosotros llevamos la concejalía de Deportes”, recordó por su parte la vicealcaldesa, a la vez que recalcaba que este área delegada, que dirige Sofía Miranda (Ciudadanos) se creó en parte para impulsar la candidatura olímpica. Villacís también aclaró que le da lo igual “quién haga el anuncio” y que lanzó la noticia de la candidatura madrileña porque le preguntaron por ello: “No iba con la intención de contarlo, pero si me preguntan no miento”. No obstante, Almeida ha recordado que aunque esta concejalía “tiene un papel importante” en una hipotética candidatura, “no es menos cierto” que también entran en la ecuación las de Obras, Desarrollo Urbano y Hacienda.
Begoña Villacís también destacó que el cambio de reglas del Comité Olímpico Internacional para nombrar ciudad candidata hace posible presentarse y ser elegidos como sede sin haber hecho un desembolso previo en infraestructuras. En estos momentos, el área de Deportes está tratando de recabar “ el apoyo de la Comunidad de Madrid, del Gobierno y de todos los actores del ámbito del deporte”, ya que considera que “es la oportunidad perfecta para que de una vez las administraciones y los partidos políticos nos unamos en torno a algo que creo es buenísimo para España y buenísimo para Madrid”.
La vicealcaldesa enumeró las razones por las que la capital debería ser ciudad olímpica, que no convencieron en las tres candidaturas anteriores para 2012, 2016 y 2020: que es la única gran capital europea que no ha albergado los JJ.OO., que cuenta con muchas infraestructuras deportivas, un gran apoyo popular al deporte... también destacó Villacís que Madrid haya sido nombrada Capital del Deporte 2022, un título por el que la capital pagó 12.000 euros y al que ninguna otra ciudad aspiraba.
La concejala de Ciudadanos recalcó que “para el año 2036 quedan quince años, en los que nos tenemos que preocupar de armar un proyecto muy competitivo” y añadió que aún no se había presentado la candidatura oficialmente “porque todavía no se ha abierto el plazo, se puede abrir de aquí a un año o en 2028. Pero tenemos que trabajar desde ya”.
La ruptura no llegará, pero el último encontronazo entre el PP y Ciudadanos en el Ayuntamiento de Madrid ha abierto una nueva grieta en los socios de coalición. Las relaciones hace tiempo que no son buenas entre el matrimonio político de José Luis Martínez-Almeida y Begoña Villacís que parecía idílico. Y el desmentido de este martes a la vicealcaldesa por parte del equipo de Almeida –por asegurar que Madrid optaría a la carrera olímpica por cuarta vez– profundiza en el distanciamiento. “Lo que ayer [por este martes] hizo el equipo del alcalde fue una desautorización pública sin precedentes. No nos planteamos una ruptura, pero esto es un antes y después”, aseguran fuentes de Ciudadanos.