La única piscina pública de verano en la mitad sur de Madrid cierra por obras al menos durante este verano. Lo confirma el Ayuntamiento de Madrid a este periódico, después de que vecinos de Arganzuela preguntaran a la Junta de Distrito por el comienzo de las obras, que había presupuestado el consistorio para este año.
“El Ayuntamiento está terminando de redactar el proyecto para la reforma integral”, explican fuentes municipales, a preguntas de Somos Madrid. Los trabajos van a consistir en una reforma de los vasos de las piscinas y de todas las instalaciones, según unos trabajos que han sido consensuados por el distrito, el área Delegada de Deporte y el área de Obras y Equipamientos.
“En cualquier caso, por su magnitud, se trata de una intervención que necesariamente requiere el cierre de las instalaciones durante una temporada”, aseguran desde el distrito, que aclaran que de no haber usado este verano para las obras deberían haber utilizado el año siguiente.
La unidad de Deportes de la Junta de Arganzuela había comunicado antes a los vecinos que los trabajos de reforma se iba a extender durante los veranos de 2024 y 2025, e incluso aventuraban que fuera hasta 2026. Sin embargo, fuentes municipales indican a Somos Madrid que el cierre se circunscribirá, en principio, a este verano.
El presupuesto municipal de 2024 incluye 2,1 millones de euros para la “reforma del vaso de piscina del Centro Deportivo Municipal de Peñuelas”, aunque hasta hoy el Ayuntamiento no había informado del alcance de los trabajos y si acabarían afectando a las tres piscinas actuales.
Las piscinas del CDM de Peñuelas son las que mayor demanda registran de todo Madrid. Cuando el calor empieza a apretar en la ciudad, sus 585 entradas disponibles se agotan cada día en un minuto. La situación es de tanta escasez que las familias de la zona llegaron a autoorganizarse otros veranos en grupos de Whatsapp para intercambiar entradas que quedaban sin uso, ante la falta de un sistema municipal de devoluciones.
El centro deportivo es el único de carácter público para darse un baño en el centro y sur del interior de la M-30. Por ello es utilizada de forma masiva por vecinos de los distritos de Arganzuela y Centro. Al empezar a circular los rumores de cierre, sus usuarios se están movilizando y presentando reclamaciones al Ayuntamiento de Madrid.
“El Ayuntamiento es consciente de las molestias que esto puede suponer, pero el objetivo es prestar a los usuarios un servicio óptimo y unas instalaciones seguras, para lo cual es necesario llevar a cabo estos trabajos”, apuntan desde el consistorio.
El precedente de El Quijote
Las obras en los vasos municipales de Madrid son frecuentes en verano. En ocasiones se solventan en un verano pero en los casos de remodelación integral puede extenderse mucho más. Es lo que sucedió durante el primer mandato de Almeida en El Quijote, un centro deportivo que acortó su piscina de 50 a 33 metros para dar cabida a instalaciones de pádel y un gimnasio.
Las obras dejaron a los distritos de Moncloa-Aravaca y Tetuán sin estas instalaciones durante tres veranos, además de llevarse por delante 44 de sus grandes árboles y una piscina infantil icónica. El consistorio argumentó entonces que el uso fundamental de aquellas instalaciones era “recreativo” y lo que buscaba la reforma integral era que se convirtiera en una instalación principalmente “deportiva”.