La Junta de Tetuán devolverá el dinero de los talleres no impartidos y aún no tiene fecha de inicio para las clases

Las salas de talleres en los Centros Socioculturales José Espronceda y Tetuán, así como el Centro Cultural Eduardo Úrculo siguen vacías. Tampoco se conoce ninguna fecha de inicio para los cursos y talleres del primer trimestre, que debían haber comenzado el pasado 1 de octubre. Todas las clases del Ayuntamiento en el distrito están suspendidas.

La licitación para impartirlas durante los dos próximos cursos, que salió antes del verano, quedó anulada por una reclamación ante el Tribunal Administrativo de la Contratación Pública de la Comunidad de Madrid que ponía de manifiesto que el dinero destinado a personal era insuficiente porque se había tenido en cuenta el convenio laboral anterior. Posteriormente, la Junta de Tetuán sacó una nueva licitación para cubrir solo el primer trimestre y salir del paso.

Sin embargo, a dicha licitación se presentaron solo dos empresas. La compañía propuesta por la mesa de contratación ha renunciado a desarrollar las actividades, por lo que podría ser penalizada por el Ayuntamiento, según han manifestado fuentes municipales a este medio. Ha trascendido que la segunda empresa, que es la que había ofertado los servicios en los centros durante los últimos años, podría renunciar también por considerar que no es viable desarrollar el servicio durante solo dos meses, pero aun no ha terminado el plazo de siete días que tiene para responder a la administración.

La Junta de Distrito envió el miércoles 23 de octubre –un día después del artículo de este medio que daba a conocer el asunto– una comunicación a las personas apuntadas en los cursos y talleres de los tres centros. El mensaje traslada a los usuarios su malestar por la situación de alumnos y profesores, afirma que está trabajando a fin de resolverla cuanto antes y dice que se “devolverá el importe de los talleres que no se hayan realizado”.

El retraso en el comienzo de los talleres ha causado un gran revuelo político en el distrito de Tetuán. Por un lado, algunos usuarios de los centros culturales se han organizado en red para hacer llegar a la Junta de Distrito su protesta y exigir soluciones. Por otro, la concejala presidente del distrito, Paula Angulo Gómez-Amorós, se reunió el miércoles con todos los grupos municipales para informarles de la situación.

Al día siguiente, la cabeza del Ayuntamiento en Tetuán contestaba en X (antes Twitter) a Rita Maestre (Más Madrid) a un mensaje que se hacía eco de la información:  “¿Ignorancia o mala fe? Los pliegos fueron informados por los servicios jurídicos y el convenio colectivo se aprobó estando ya en marcha la licitación. Los afectados saben que estamos trabajando en la solución como también lo sabíais en tu grupo. Pero os da igual todo”, decía.

El retraso ha dejado tirado a más de 2.600 usuarios, que ya habían satisfecho el pago de la matrícula e, incluso, tenían asignados los horarios correspondientes a cada grupo en aquellos cursos más multitudinarios como yoga, pilates o taichi. Además, los profesores de los talleres tienen contratos de fijos discontinuos y deben ser subrogados por la nueva empresa, por lo que en este momento se encuentran parados.

En los próximos días sabremos si los cursos comienzan con un mes de retraso o, si no hay empresa y hay que sacar una nueva licitación, será imposible impartirlos durante este trimestre.