El tiempo pasa más despacio para los vecinos del Paseo de la Dirección, a tenor de los avances de los acontecimientos en su barrio. O mejor dicho, los años cunden poco, y quizá a los vecinos se les hacen largos. Después de tres lustros de idas, venidas, piquetas, barro y expropiaciones, siguen esperando que la accidentada reforma de la barriada concluya. ¿Hay novedades al respecto últimamente? Sí, hay previsiones para los próximos años y algunas hasta van asociadas al ansiado sustantivo que tanto reclaman y que debería dar sentido a la reordenación del área: equipamientos.
Equipamientos
El pasado 9 de marzo el Ayuntamiento de Madrid presentó a bombo y platillo su plan de obras para lo que queda de legislatura y para la siguiente. Una hoja de ruta que cuenta con apartado propio para dos infraestructuras municipales para el área del Paseo de la Dirección de las que ya se había hablado con anterioridad. Ninguna novedad prevista, de momento, en las parcelas municipales del ámbito y, aún así, es motivo de celebración que se oiga hablar de equipamientos en una zona donde hasta el momento los vecinos solo han visto crecer pisos.
Por un lado, se anuncia el CDM del Paseo de la Dirección (en la calle del Paseo de la Dirección con Ofelia Nieto), que retoma el polideportivo nonato que ya se proyectó en el Plan especial de inversión y actuación territorial para el distrito de Tetuán (2004-2008/9). Habrá que esperar para ver qué forma final toma, pero, si realmente es hijo del proyectado en su día, podría parecerse a un edificio con dos gimnasios, dos piscinas, una sala multiusos y tres pistas polideportivas, además de varias plantas de aparcamiento bajo rasante.
También se concreta la ubicación de la traída y llevada escuela infantil –prometida hace tiempo y para la que se han barajado varias parcelas distintas de la que finalmente la albergará–. Será en el 105 del Paseo de la Dirección.
Habida cuenta de que el plan de infraestructuras del Ayuntamiento es una previsión hasta el año 2027, a algunos vecinos los dos proyectos les han sabido a poco. Además, la intención del Consistorio es tener listas la mitad de las obras presentadas antes de las próximas elecciones, pero estas dos infraestructuras, con todas las tramitaciones por delante, probablemente no estarán entre ellas.
Reurbanización del barrio
Los tiempos de la reurbanización de las calles del ámbito del Paseo de la Dirección que tenemos por delante no son muy precisos, aunque hay un plan trazado para los próximos movimientos.
El dinero para la puesta a punto de la calle Cosmos, que no está en el presupuesto municiapal de este año, tiene que salir de remanentes de 2020 hasta sumar 500.000 euros. Tendrían que continuar por Alberdi entre Capitán Blanco Argibay y Paseo de la Dirección; Capitán Blanco Argibay con la Travesía de Pando, y por la calle de Isabel Serrano.
Según aclaró la Concejala Presidenta de Tetuán, Blanca Pinedo, en la última Junta Ordinaria de Distrito, la zona de Cosmos, aún sin fecha de comienzo de obras a la vista, es la única que tiene garantizada su puesta en marcha este año. El destino del resto de calles dependerá de cuándo vaya liberando suelo la Dirección General de Urbanismo.
Vivienda pública
El pasado 8 de marzo, Mariano Fuentes, Delegado del Área de Desarrollo Urbano, anunciaba en su cuenta de twitter que el Ayuntamiento cedería una parcela a la EMVS para la construcción de 70 viviendas de alquiler (una inversión de 3,5 millones de euros).
Una parcela en la calle Capitán Blanco Argibay que viene a sumar viviendas a las protegidas de las dos torres de 25 plantas del final de Marqués de Viana, que finalmente no serán oficinas, como pretendía Axa Seguros, sino viviendas protegidas (nivel VPPL). 330 viviendas VPPL con garajes, trasteros y zonas comunes con tres sótanos (bajo más 24 plantas sobre rasante) para lo que será el 103 de Marqués de Viana; y un edificio de 209 viviendas VPPL en el número 133 del Paseo de la Dirección.
La reordenación del área del Paseo de la Dirección comenzó en 2007, con Alberto Ruiz Gallardón en la alcaldía. Tras diferentes administraciones y vicisitudes, en las que se ha pasado por el abandono de las obras del barrio a medias, distintos proyectos urbanísticos y complejos realojos, los vecinos siguen viendo como la velocidad con la que el Paseo de la Dirección toma forma es menor de la que les gustaría.