Mapa de las nuevas cámaras de vigilancia del Ayuntamiento de Madrid en Bellas Vistas

Aunque el jueves 28 de enero el Ayuntamiento aseguró que las cámaras de Bellas Vistas estaban listas para operar, la realidad era que los operarios encargados de instalar los aparatos los estaban terminando de colocar el viernes 29, después de que los responsables municipales urgieran a Delegación del Gobierno para que autorizara el comienzo de las grabaciones.

Las cámaras de vigilancia son las primeras que se colocan en Tetuán después de años de polémica por su implantación: algunos vecinos las quieren, otros no, y el nivel de delitos que registra el barrio no lo justifica. Pero tanto Ciudadanos como el PP abogaron por su instalación mientras estaban en la oposición y a su llegada al poder aceleraron los trámites para ponerlas en marcha.

Los dispositivos vigilan un área de diez pequeñas manzanas del barrio de Bellas Vistas, situadas alrededor de las calles Topete, Tenerife y Goiri, una zona conocida como el Pequeño Caribe de Madrid por su abundante población de origen dominicano, que convive con vecinos tetuaneros de todas las edades. La ubicación de los dispositivos de grabación es pública por ley -se publica en el Portal de Transparencia- pero como aún no se han puesto en marcha, el Ayuntamiento no ha publicado todavía la información.

Somos Tetuán ha elaborado un plano con todos los lugares en los que se encuentran los nuevos dispositivos de vigilancia:

Lista de ubicaciones:

En Madrid se despliegan actualmente más de 2.000 cámaras de videovigilancia en sus calles, incluyendo las de los coches patrulla de la Policía Municipal. El visionado y almacenamiento de imágenes se desarrolla de forma centralizada, desde una unidad especial que el cuerpo tiene en la Casa de Campo.

Las que se capten en Bellas Vistas también se almacenarán allí, cuando el Gobierno nacional autorice su uso, algo que se prevé que suceda a lo largo del mes de febrero, explicaba hace unos días la delegada de Seguridad municipal, Inmaculada Sanz. Según sus palabras, tienen como finalidad el “efecto disuasorio” a la hora de cometer delitos y también “el esclarecimiento” de los que tengan lugar en las calles que vigilan.