El esperado centro deportivo municipal del Paseo de la Dirección será finalmente un edificio de dos plantas con gimnasio, piscina cubierta y ningún espacio para los deportes de equipo. El Ayuntamiento de Madrid ha decidido que lo construya y explote una empresa privada durante los próximos 25 año, siguiendo un modelo similar al futuro polideportivo de Cuatro Caminos por el que se renuncia a la gestión directa a cambio de no gastar ni un euros del presupuesto municipal en este equipamiento.
La parcela sobre la que se asentará está situada en en el cruce de la citada calle con Ofelia Nieto. Tiene una superficie de 10.274 metros cuadrados, de los que 3.362,81 se emplearán en levantar esta instalación deportiva. A su lado habrá un aparcamiento al aire libre con 36 plazas. La estrella del edificio será la piscina climatizada situada en su planta baja, que contará a su lado con otro vaso de aprendizaje. Junto a ellas se situarán cuatro vestuarios y el vestíbulo de acceso al edificio, que dará a la calle Isla de la Gomera, según el estudio de viabilidad del Ayuntamiento de Madrid al que ha tenido acceso Somos Tetuán.
Encima, en la primera planta, se estarán ubicados otro vestíbulo y cuatro grandes espacios destinados a la actividad de gimnasio, con sala de yoga, sala de spinning, sala de baile y sala de máquinas. En ellos y según el documento municipal está previsto que se den clases de salsa, merengue, bailes de salón, judo, karate, pilates, o body combat, entre otros. La planta sótano servirá para albergar el vaso de la piscina, una zona de vestuarios de personal y los cuartos de instalaciones del edificio.
El futuro equipamiento no tendrá ninguna cancha para practicar deportes de equipo a cubierto, una decisión similar a la que se tomó en el proyecto del CDM de Cuatro Caminos para hacer más atractiva la concesión a las empresas licitadoras, que prefieren más superficie para aparatos de gimnasio por generar mayor rentabilidad. “Se opta por una solución que encuentre los intereses de uso por parte de la comunidad, con la viabilidad económica–financiera adecuada para la explotación y mantenimiento de las referidas instalaciones deportivas”, reza el estudio de viabilidad municipal.
El Ayuntamiento calcula que el polideportivo podrá dar servicio a 233.217 habitantes de Tetuán y distritos cercanos, 47.791 de los cuales podrían llegar a pie caminando un máximo de 10 minutos. El resto podrían tener acceso a las instalaciones a menos de cinco minutos en coche, como muestra el siguiente gráfico del estudio:
La empresa concesionara que gane el concurso se ocupará del estudio de detalle, redactar el proyecto definitivo, tramitar las licencias y ejecutar la obra en un plazo de 18 meses desde su aprobación final. Deberá invertir en ello unos 6,9 millones de euros inicialmente, a lo que habría que sumar los gastos asociados al centro deportivo. Se calculan unos ingresos de 60,8 millones de euros a lo largo de los 25 años de explotación, durante los que se abonarán 4,5 millones de euros al Ayuntamiento en concepto de canon. El área de Obras del Ayuntamiento prevé que a partir del año 17 el concesionario entre en ganancias.
El edificio se construirá con estructura de hormigón armado exceptuando las vigas de piscina que salvan las grandes luces, que serán de madera laminar. En cuanto a los materiales de fachada estará compuesta por paneles de chapa tipo atenea formando fachada ventilada y carpinterías en tonalidades similares.
El proyecto del polideportivo difiere bastante del que se estudió hace décadas, dentro del Plan especial de inversión y actuación territorial para el distrito de Tetuán (2004-2008/9). Entonces, en la parcela estaba previsto edificar un edificio con dos gimnasios, dos piscinas, una sala multiusos y tres pistas polideportivas, además de varias plantas de aparcamiento bajo rasante.
Más Madrid ha denunciado la privatización de las obras y de la gestión de este y otros futuros polideportivos municipales. “”Este Ayuntamiento sigue su hoja de ruta chapuza en materia deportiva hipotecando a 25 o 40 años los servicios municipales para favorecer los intereses de las empresas en vez los de la ciudadanía. Esta es la realidad y esta es la apuesta de Almeida por la gestión indirecta“, ha declarado su concejala Mar Barberán.