Este lunes, los pasajeros que cogieron la línea 2 en Cuatro Caminos notaron algo nuevo en el andén. A primera hora de la mañana se empezaban a distinguir los vinilos negros que conformaban la parte inferior de un mural sobre los azulejos modelo metro recientemente colocados en la pared. Horas después, el lienzo ya mostraba íntegras distintas escenas que rememoran algunos hitos de la historia de Metro y de la estación: la inauguración del metropolitano en 1919, la de la línea 2 en 1929, la llegada de la línea 6 en 1979 y el centenario de la infraestructura en 2019. Es divertido fijarse en las modas de cada año.
Este mural es el primero de la anunciada tematización de la estación, cuyas paredes albergarán siete lienzos y dos murales realizados en aluminio impreso “que mostrarán la historia genérica de la compañía, así como la concreta de esta estación”, según explican desde la compañía.
Aunque en un primer momento se temió que los murales sustituyeran a los clásicos azulejos estilo metro, que fueron picados para llevar a cabo la reforma, finalmente la estación vuelve a estar revestida de azulejos biselados y los murales, a tenor del que ya conocemos, no los tapan.
La puesta en limpio de la estación incluirá también la instalación de una farola señalizadora del metro. El elemento será rojo y blanco y estará coronado con el antiguo rombo de Metro, como lo diseñó Antonio Palacios para indicar las entradas del suburbano.
Las obras de modernización tienen como fin sustituir los revestimientos, instalaciones y tecnología localizados en los andenes y sus accesos por otros materiales y equipamientos más actuales y fáciles de mantener. Están afectando a las líneas 1 y 2, a los pasillos de distribución y al vestíbulo principal. Con un presupuesto de cinco millones de euros, deberían haber acabado el pasado mes de octubre, pero llegarán a su fin el próximo mes de junio, según anunció el pasado mes de febrero Metro de Madrid.