La estatua del expresidente del PSOE y ministro de Hacienda, Defensa y Obras Públicas de la II República Indalecio Prieto, situada en los Nuevos Ministerios de Madrid, ha amanecido esta mañana con la pintada de 'Asesino', lo mismo que le ocurrió hace unos días a la cercana estatua del expresidente del Gobierno republicano Francisco Largo Caballero.
“No es un acto vandálico ni una pintada más. No vamos a permitir que el odio impregne nuestra sociedad. Trabajamos para proteger el presente y el futuro de los españoles frente a las amenazas. Seguiremos defendiendo la memoria de Indalecio Prieto y Largo Caballero. Siempre”, ha escrito el PSOE en su cuenta de Twitter para denunciar el ataque.
Este segundo ataque se produce tres semanas después de que el Ayuntamiento de Madrid, con los votos a favor de Ciudadanos, PP y Vox, decidiera retirar los nombres de la avenida Francisco Largo Caballero y del bulevar Indalecio Prieto, así como la placa en la plaza de Chamberí dedicado al primero, además de instar a la eliminación de las estatuas erigidas en Nuevos Ministerios en su memoria.
Tras el ataque a la estatua de Largo Caballero, Vox amenazó al Gobierno en Twitter calificando lo ocurrido de “primer aviso” para derogar la Ley de Memoria Histórica. Este lunes la diputada de Vox en el Congreso Macarena Olona ha publicado en sus redes una fotografía en la que aparece frente a la estatua del expresidente del Consejo de Ministros de la República vandalizada portando una bandera de España con el crespón negro en la que se leer 'Gobierno dimisión'. “Madrid resiste”.
La propuesta de eliminar las calles de ambos políticos socialistas la presentó en Cibeles el portavoz municipal de Vox, Javier Ortega Smith, con el objetivo de acabar con cualquier homenaje a lo que calificó de “personajes siniestros” como Largo Caballero y el también ministro socialista en la República Indalecio Prieto. “Ambos son exponentes de totalitarios criminales antidemócratas que no merecen un reconocimiento en las calles de Madrid”, indicó.
El presidente del Pleno, Borja Fanjul (PP), justificó el apoyo a la eliminación de este homenaje en el callejero en el artículo 15 de la Ley de Memoria Histórica, que permite a las administraciones retirar escudos, placas o menciones conmemorativas “de la exaltación de la sublevación militar, de la Guerra Civil o de la represión de la dictadura”.
“Clichés franquistas”
La intención del Ayuntamiento de Madrid de eliminar del callejero de la capital los nombres de los históricos socialistas ha provocado la reacción de los historiadores. Un centenar de estudiosos de la Historia Contemporánea, de universidades españoles y extranjeras, ha firmado un informe que desmonta los argumentos de la extrema derecha, asumidos por PP y Ciudadanos, para retirar las dos calles –una avenida en Ciudad Lineal y un bulevar en Vicálvaro– respaldándose en la Ley de Memoria Histórica.
Los historiadores firmantes concluyen, tras analizar el texto de Vox aprobado en el Pleno del Ayuntamiento de la semana pasada, que se basa “en viejos y desacreditados clichés pseudohistóricos de la propaganda franquista”. “Acarrea de forma confusa los mitos guerracivilistas enunciados en 1939 por el Dictamen de la Comisión sobre ilegitimidad de poderes actuantes en 18 de julio de 1936”, dice el escrito, respaldado por reputados expertos como Paul Preston, Walther L. Bernecker, José Álvarez Junco o Antonio Cazorla.
Los catedráticos y profesores desmienten en 13 puntos la proposición de Vox en un “análisis preliminar” basado “en pruebas documentales”. “A diferencia de la nula documentación que se adjunta a la iniciativa de Vox, los profesores e investigadores abajo firmantes declaran estar en condiciones de aportar pruebas documentales de todas las afirmaciones que se hacen en la presente prueba de verificación”, señala el manifiesto. Los firmantes ponen el documento “a disposición” del Ayuntamiento de Madrid para que se tenga en cuenta antes de adoptar “la decisión definitiva”: “Este juicio técnico preliminar aspira a convertirse en un futuro próximo en un informe donde se clarifique de una vez por todas la ejecutoria de estas dos importantes figuras de nuestra historia contemporánea, sustrayéndolas de las maquinaciones propias de la baja política”.