La empresa española de movilidad Cabify pondrá en servicio próximamente varios Toyota Mirai, propulsados por una pila de combustible de hidrógeno, dentro de su oferta de vehículos de cero o bajas emisiones. Según el acuerdo que han suscrito ambas compañías, junto con la suministradora del hidrógeno verde que utilizará el coche, Enagás, dos de estos modelos estarán disponibles para los usuarios de Cabify durante el mes de julio, otros dos después de agosto y se llegará, en principio, a un total de 14 unidades.
La apuesta de la empresa nacida en Madrid por los vehículos eléctricos de pila de combustible de Toyota tiene una gran relevancia para el sector de la movilidad, ya que se trata de la primera vez que esta tecnología se incorpora como alternativa sin emisiones para los clientes de vehículos de alquiler con conductor (VTC) en España.
La flota de Toyota Mirai, que operará en Vecttor, una filial de Grupo Cabify, utilizará el hidrógeno como fuente de energía para generar, dentro de la pila de combustible, la electricidad necesaria para alimentar el motor eléctrico, lo que da lugar a agua como único residuo en todo el proceso. El tiempo de repostaje de estos vehículos lleva entre 3 y 5 minutos, similar al de un vehículo de combustión convencional, y ofrece una autonomía de alrededor de 550 kilómetros.
Los usuarios de la plataforma encontrarán los Mirai dentro de la categoría Cabify Eco, diseñada para clientes de movilidad corporativa y en la que se incluyen únicamente vehículos electrificados (híbridos, híbridos enchufables y eléctricos). En el caso de los particulares, estarán disponibles en las categorías Cabify, Cuanto Antes o Kids. Todo ello sin subida de tarifa.
El repostaje se efectuará en la hidrogenera privada que la filial de Enagás, Scale Gas, tiene en la Avenida de Manoteras, 34 de Madrid. La estación se inauguró en enero de 2021 y es la primera que permite recargar hidrógeno a 700 bares en nuestro país.
Un Mirai de primera generación como el que ahora pone en servicio Cabify puede almacenar 5 kilos de hidrógeno. Al precio actual de este gas en usos a pequeña escala, unos 10 euros por kilo, el coche podría recorrer más de 500 km a un coste de 50 euros, según ha detallado el presidente y CEO de Toyota España, Miguel Carsi, durante la presentación del acuerdo a los medios de comunicación.
Carsi ha explicado también que los coches pasarán a manos de Cabify en modalidad de renting a cuatro años con Kinto, la firma de Toyota especializada en soluciones de movilidad.
Hacia precios más competitivos
Sobre el coste del hidrógeno de origen renovable, el consejero delegado de Enagás, Arturo Gonzalo, ha asegurado que se encuentra ya en niveles competitivos dado el altísimo precio de los carburantes en nuestro país actualmente. En todo caso, estima que no debería tardar en bajar a entre 3 y 4 euros por kilo, lo que haría más viable su expansión en el sector del transporte.
Daniel Bedoya, regional manager de Cabify en España, ha destacado la importancia de comenzar la implantación del hidrógeno por las flotas, antes incluso de que se inicie la construcción de una red extensa de repostaje. Los servicios municipales, por ejemplo, son ideales en su opinión como campo de pruebas de la utilidad del hidrógeno con vistas a que se convierta en una energía “masiva y rentable”.
Los tres intervinientes en el acto coinciden en la necesidad de seguir avanzando hacia una movilidad de cero emisiones y señalan al hidrógeno como un vector energético que debe desempeñar un papel relevante en ese proceso de descarbonización.
Al menos sobre el papel, el hidrógeno es una fuente energética ilimitada -es el elemento más abundante en la naturaleza, aunque rara vez se encuentra en estado puro-, se puede obtener de forma sostenible, es fácil de almacenar y transportar y puede utilizarse en entornos muy diferentes, desde el transporte hasta la climatización de hogares y edificios.