Después de hacerse esperar largo tiempo, Lancia acaba de desvelar por fin el prototipo con el que pretende impulsar su reintroducción en Europa y que define, según su máximo responsable, Luca Napolitano, lo que la marca se propone hacer en los próximos 10 años. El Lancia Pu+Ra HPE se presenta así como un manifiesto no solo de diseño, sino de también de sostenibilidad, sensación interior de hogar y electrificación.
El Pu+Ra HPE anticipa una primera hornada de productos de la nueva Lancia, prácticamente inactiva desde 2017 salvo en Italia -donde aún comercializa el modelo Ypsilon-, que dará inicio en 2024 con el nuevo Ypsilon y proseguirá en 2028 con el debut del nuevo Delta, que coincidirá con el momento en que la marca procederá a vender exclusivamente coches eléctricos.
Dos años antes, todos los vehículos nuevos que presente serán también eléctricos de batería. En cuanto al Ypsilon, estará disponible tanto en versión híbrida como enteramente eléctrica.
El concept car recién dado a conocer puede presumir, además, de ser el primero inspirado en el mundo del diseño de muebles italiano, gracias a una colaboración con la firma Cassina. Por último, estrena dentro del grupo Stellantis la novedosa interfaz SALA, que centraliza las funciones de audio, climatización e iluminación permitiendo al conductor y los pasajeros adaptar el ambiente dentro del coche simplemente tocando un botón o mediante el sonido de su voz.
Como eléctrico, el Pu+Ra HPE se beneficia también de las nuevas plataformas de Stellantis, que en su caso le procurarían más de 700 kilómetros de autonomía, un consumo de energía inferior a 10 kWh/100 km y tiempos de recarga ultrarrápidos.
Estos registros son posibles con la ayuda de soluciones aerodinámicas entre las que figuran el techo rebajado, unos retrovisores exteriores digitales y extremadamente finos, tres cubrecárteres delanteros y unas ruedas específicamente desarrolladas para las que Goodyear ha creado, además, un neumático ad hoc.
Sobre el nombre del prototipo, Lancia explica que Pu+Ra hace referencia al nuevo lenguaje de diseño de la marca, puro y radical, mientras que HPE son las siglas de High Performance Electric (Alto Rendimiento Eléctrico), en alusión a que se trata de un coche que es a la vez “ecosostenible, emocionante y evolucionado”. El acrónimo HPE (del inglés High Performance Estate) se empleó por primera vez en los años 70 para el Lancia Beta, como símbolo de deportividad y funcionalidad.
En cuanto al color Progressive Green, se considera progresivo porque mira al futuro de la firma italiana y a los clientes del mañana, y verde por su valor en términos de sostenibilidad. El tono verde azulado, con un cálido acento dorado, está realizado en metal líquido con pigmentos de última generación y rinde homenaje al imperecedero Lancia Flaminia Azzurro Vincennes.
El diseño italiano llevado al interior de un coche
La inspiración en el diseño del interior, fruto del trabajo conjunto de Lancia y Cassina, queda patente en la alfombra redonda y en los asientos delanteros, inspirados en los conocidos sillones Maralunga creados por Vico Magistretti para la prestigiosa firma de decoración.
También en la parte trasera encontramos rasgos poco acostumbrados en el habitáculo de un coche, como los elementos tapizados en la zona de estar, la mesa de centro y un despliegue de materiales cálidos coronados por una alfombra que busca transmitir la sensación de hogar. La alfombra, hecha de lana natural, es un objeto artesanal fabricado sin desperdicios que, con su forma circular, acompaña tanto los rasgos estilísticos del salpicadero como los de la mesita de la parte posterior y la colocada en la consola central.
El concept luce un innovador techo circular que permite una amplia visión panorámica e incluye una clara referencia a elementos de arquitectura típicos del nuevo estilo de Lancia. Para la luneta trasera, los diseñadores se han basado en el Lancia Beta HPE de los años 70 y sus líneas horizontales, que han reinterpretado, en clave contemporánea, con la estructura de la clásica persiana veneciana como motivo.
En conjunto, el Pu+Ra HPE muestra al mundo un lenguaje de diseño puro y radical, como se reivindica, en el que los volúmenes de los nuevos coches se crean mediante la combinación de formas elementales, como el círculo y el triángulo, con algunos detalles eclécticos. Como remate, el prototipo rinde tributo al emblemático Lancia Stratos, del que hereda sus famosos pilotos traseros redondos.