En un año clave para su transformación en fabricante de modelos eléctricos, Peugeot acaba de presentar la variante de baterías de su benjamín, el 208, heredero de un vehículo emblemático de la marca francesa como fue el 205. Si en enero se desvelaba el nuevo E-308, y hace pocas semanas conocíamos -aunque únicamente en parado- ya el futuro E-3008, ahora le ha llegado el turno al E-208. Y el año traerá otras novedades que luego detallaremos.
El pequeño de la familia eléctrica recala en el mercado español con tres opciones mecánicas para elegir y entre las que ya no figura ninguna diésel. Junto a dos variantes de gasolina, de 75 y 100 caballos, y otras dos mild hybrid, bien de 100 bien de 136 CV, se ofrece una 100% eléctrica que a su vez presenta dos declinaciones: la ya disponible hasta el momento, con motor de 136 CV y batería de 50 kW, y otra nueva que ya incorpora un nuevo propulsor eléctrico de 156 CV y batería de 51 kW.
Este último dispositivo permite extender la autonomía entre recargas a un rango comprendido entre 363 y 400 kilómetros. En utilización exclusivamente urbana, el alcance sube a 519-566 km, cifras todas homologadas en ciclo WLTP.
En una primera toma de contacto con el vehículo -equipado con el nuevo sistema de impulsión- hemos obtenido un consumo medio de 16 kWh/100 km, practicando una conducción cuidadosa pero no obsesionada con la eficiencia. De este registro se deriva una autonomía real que supera ligeramente los 300 km, más o menos lo mismo que el Peugeot E-308, que dispone de una batería un poco mayor (54 kWh) y gasta también un poco más, alrededor de 17 kWh/100 km.
Al igual que su hermano de tamaño compacto, el E-208 tiene en carretera un comportamiento ejemplar, diríamos incluso que delicioso para un amante de la conducción. Lo que aquel aporta de aplomo, debido a una batalla más larga, se convierte en este en una gran agilidad que se acompaña de una dirección sumamente precisa y unos cambios de dirección rapidísimos.
El resto de lo que los diferencia se mide en términos de espacio interior y de carga, los que marcan su pertenencia a segmentos distintos (un segmento B frente a un C). En cualquier caso, el pequeño de los Peugeot, aunque se antoja por tamaño un coche eminentemente urbano y periurbano, resulta a todas luces capaz cuando es preciso afrontar un desplazamiento más largo.
El 208 eléctrico se entrega con un cargador embarcado de 7,4 kW (el de 11 kW es opcional) y un cable de modo 3. A diferencia del E-3008, para el que se ha decidido que sea opcional en los países del sur de Europa, aquí la bomba de calor es de serie en todas las versiones.
En una toma doméstica de 3,4 kW, la batería de 51 kW se carga del 20% al 80% en 10 horas y media, y en una de 7,4 kW se necesitan 4 horas y 25 minutos. Si se recurre a la carga rápida con corriente continua, a un máximo de 100 kW, la operación lleva 25 minutos.
Ligero y rápido
El E-208 mide 4,05 metros de largo y 2,54 m de distancia entre ejes. Al ser relativamente ligero para tratarse de un modelo de baterías (1.455 kilos en vacío), consigue un consumo muy contenido al tiempo que unas prestaciones notables: 8,2 segundos en el 0-100 km/h, 5,3 en el 80-120 km/h y 30,7 segundos para completar el primer kilómetro desde parado.
Esta variante eléctrica pierde algo de capacidad de maletero frente a la de combustión y a las de hibridación ligera: en vez de 352 litros con los asientos traseros en su posición y 824 con ellos plegados, en este caso disponemos de 309 y 779 litros, respectivamente.
Peugeot pone a la venta el modelo en una paleta de siete colores exteriores, dos de ellos nuevos: el Gris Selenium y el Amarillo Agueda de las imágenes que acompañan a este texto. La gama se compone de los acabados Active, Allure y GT, y la nueva versión eléctrica de 156 CV solo puede solicitarse en este último, más deportivo y equipado, entre otras cosas con llantas de 17 pulgadas e instrumentación en 3D.
La pantalla central pasa a ser de serie de 10 pulgadas en todas las variantes del coche. A partir del nivel de equipamiento Allure se incorpora el sistema de infoentretenimiento i-Connect, y siempre como opción se ofrece la modalidad más avanzada del mismo dispositivo, llamada i-Connect Advanced, provista además a partir de ahora de ChatGPT.
El 308 eléctrico, en su versión de menor potencia (136 CV) y acabado Active, está disponible desde 32.500 euros, que pueden quedarse en 25.550 en caso de descontar el máximo de las ayudas previstas en el Plan Moves III, un total de 7.000 euros. El mismo coche sale por 175 euros mensuales en modalidad de renting para particulares. En ambos supuestos, la marca se hace cargo del coste del cargador, no así de su instalación.
En cuanto al E-208 de 156 CV y batería de 51 kW, asociado como hemos visto al acabado GT, tiene un precio de partida de 38.650 euros.
Como apuntábamos al comienzo, 2024 viene cargado para Peugeot de novedades en el campo de la electrificación. Tras los nuevos E-308, E-308 Station Wagon (familiar), E-3008 y E-208, el año verá también la aparición de las versiones enteramente eléctricas del 408 y del 5008. Las primeras imágenes de este último han sido desveladas justamente hoy, día 20 de marzo, por la firma francesa del grupo Stellantis, que ha confirmado además que contará con tres versiones eléctricas, de 210, 230 y 320 CV, una mild hybrid de 136 y otra híbrida enchufable de 195 CV.