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Junior Ibrida, el ‘elegido’ de Alfa Romeo

El Junior es el modelo más pequeño y juvenil de Alfa Romeo.

Pedro Urteaga

13 de diciembre de 2024 12:17 h

Todos los modelos de coches nuevos llegan al mercado con metas ambiciosas, pero pocas son tan acuciantes como las que Alfa Romeo ha encomendado a la versión híbrida (Ibrida, en su nomenclatura) del Junior. El modelo más pequeño y juvenil de su gama nace con la misión, por un lado, de revitalizar su nivel de ventas y, por otro, de ayudar a contener su promedio de emisiones. Esto último urge en vísperas de un año clave, 2025, en el que los fabricantes se enfrentan a multas cuantiosas en caso de incumplir los objetivos de emisiones fijados por la Unión Europea.

Los responsables de la marca italiana en España señalan que el Ibrida vendrá a copar el 80% de las entregas del Junior en nuestro país. El 20% restante corresponde a la variante eléctrica de la que te hablamos en este artículo, que dispone de 156 caballos de potencia y una autonomía teórica de 410 kilómetros.

A lo largo del año entrante se pondrá a la venta otra versión eléctrica de 280 CV denominada Veloce, y antes de primavera habrá un Junior Ibrida Q4, que cuenta con dos motores eléctricos y tracción a las cuatro ruedas.

La que está ya disponible en los concesionarios incorpora el sistema de hibridación ligera de 48 voltios que conocemos por otros modelos del grupo Stellantis. Se compone de un motor de gasolina tricilíndrico de 1,2 litros y 136 CV y una pequeña batería que se recarga automáticamente en frenadas y deceleraciones y alimenta un propulsor eléctrico de 21 kW.

Gracias a que este motor está integrado dentro de la transmisión, el vehículo es capaz de desplazarse en modo eléctrico en parte de los trayectos cotidianos, especialmente durante las maniobras de aparcamiento o al circular a baja velocidad en zonas urbanas. Esta cualidad se suma al codiciado distintivo Eco que la DGT concede a todos los modelos provistos de algún tipo de hibridación.

El Junior Ibrida acelera de 0 a 100 km/h en 8,9 segundos y presenta un consumo medio que ronda los 5 litros/100 km, con unas emisiones de CO2 que oscilan entre 111 y 117 g/km -en función del equipamiento embarcado-, lo que lo exime de pagar impuesto de matriculación. En conducción real, el gasto de carburante se sitúa en unos 6 litros, y solo a alta velocidad en autopista se ven en el ordenador de viaje guarismos superiores a 7.

Recordemos que el Junior es un SUV urbano de 4,17 metros de longitud concebido, como apuntábamos al inicio, para seducir a un público más juvenil del que suele acercarse a la firma del Biscione. Sus plazas traseras no están sobradas de espacio, pero en cambio el maletero destaca por una capacidad de 415 litros y por la posibilidad de colocar la pieza que le sirve de base en tres alturas diferentes.

Como es algo de lo que se habla con frecuencia, conviene aclarar también que el frontal del coche puede lucir dos parrillas muy distintas, lo cual no depende del sistema de impulsión elegido (microhíbrido o eléctrico) sino del nivel de equipamiento que se solicite. Así, las versiones altas de gama llevan un scudetto en plástico negro que representa la serpiente de Alfa y que se denomina Progreso; las básicas exhiben en su lugar la parrilla Leyenda, donde el nombre de la marca aparece escrito en caracteres de estilo retro.

El Junior mild hybrid se ofrece desde 28.147 euros en este nivel de entrada, y por 31.000 en uno más completo que se denomina Speciale. Aquí se incorporan como elementos distintivos unas llantas de 18 pulgadas específicas, portón manos libres, lunas traseras tintadas, borde rojo en los faldones laterales y trasero y un kit de carrocería Diabolik en negro mate. El techo puede llevar el color de la carrocería o ser negro, y en ambos casos existe la opción de instalar techo solar.

Desde la versión básica se suministran de serie llantas de aleación de 17“, cuadro de instrumentos Cannocchiale (característico de Alfa, de tipo prismático) de 10,25”, pantalla táctil de 10“ con Apple Car Play y Android Auto, control de crucero adaptativo, sensores de estacionamiento traseros o dispositivo de reconocimiento de usuarios vulnerables en carretera, entre otros equipamientos.

Variante de tracción total

El Junior Ibrida tendrá a partir de marzo una variante de la misma potencia, 136 CV, pero con tracción total (Q4), que al motor eléctrico emplazado en el eje delantero suma otro -en principio de la misma potencia, 21 kW- en el trasero. Esto se acompaña de un programa de conducción especial para condiciones de baja adherencia, llamado también Q4, que se encarga de que el motor delantero envíe de manera constante energía al posterior con el fin de que el coche disponga en todo momento de tracción en las ruedas de ambos ejes.

Esta tecnología no difiere sobre el papel de la que emplea el Jeep Avenger 4xe, pensada especialmente para ser de ayuda a baja velocidad. En el modelo americano, también del grupo Stellantis, los dos motores eléctricos impulsan el coche por debajo de 30 km/h. Superada esta velocidad, el motor trasero solo se pone en funcionamiento si es necesario, es decir, cuando se detecta una pérdida de tracción en las ruedas delanteras, y a más de 90 km/h se desacopla del eje para disminuir las pérdidas de arrastre.

En el caso del Junior y de Alfa, una marca conocida históricamente por el dinamismo de sus vehículos, cabe suponer que los ingenieros trabajarán no solo para mejorar la capacidad de tracción, sino también para ofrecer a sus clientes -sobre todo a los más alfistas- un comportamiento vivo y el placer de conducción que se espera de la firma turinesa. Los responsables de ésta en nuestro país han encarecido a los encargados de desarrollo del modelo que esta versión Q4 no supere los 120 g/km de CO2 que permiten eludir el impuesto de matriculación en España. 

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