Audi A5 Avant TDI MHEV plus: para grandes viajeros

Tal vez a más de uno le pueda sorprender, al encontrase con el presente artículo, que se hable del Audi A5, al que tenían por un cupé deportivo, junto a la foto de un modelo de carrocería familiar, o Avant. Tranquilos: no se trata de un error, sino de una simple muestra de la reconfiguración de gama que ha iniciado el fabricante alemán, en la que se incluye la fusión en un solo vehículo de los antiguos A4 y A5.
Mientras que el nuevo modelo muestra, en su configuración berlina, una silueta que recuerda a la del A5 que tal vez recuerda el confundido lector, su versión Avant guarda más semejanzas con el antiguo A4 familiar, aunque las diferencias son aquí abismales. Para empezar, es sensiblemente mayor -mide ahora 4,83 metros de largo- y tiene una carrocería que combina una gran distancia entre ejes (2,9 m) con voladizos cortos para dar lugar a un habitáculo muy amplio. Esta batalla larga contribuye, además, al elevado confort de marcha que se disfruta a bordo.
El nuevo A5 Avant dispone de un gran maletero que cubica 476 litros en las variantes de combustión convencionales y 448 litros en la diésel de hibridación ligera que hemos probado en esta ocasión. El volumen total asciende en esta última a 1.396 litros cuando se pliegan los asientos traseros; datos todos que refrendan las aptitudes del nuevo modelo de Audi como coche familiar (de familia) e ideal para viajar.

La versión con motor TDI, de 204 caballos, se asocia a un sistema de 48 voltios en el que se integran un motor eléctrico de 18 kW y una pequeña batería de 1,7 kWh. Su función es tanto ayudar a impulsar el vehículo en ciertas condiciones como generar corriente eléctrica, y en el mercado español merece, para el vehículo que lo incorpora, el distintivo Eco de la DGT.
Con independencia de la etiqueta, no se puede ocultar que un coche diésel no es a estas alturas la opción más recomendable para alguien que se mueve habitualmente por ciudad y alrededores, básicamente porque un motor de este tipo, aunque genera menos CO2 que uno de gasolina equivalente, emite más cantidad de los gases (NOx, sobre todo) y las partículas que resultan más nocivos para la salud.
Dicho esto, la hibridación del motor -que Audi no ha introducido en las versiones de gasolina, salvo en el deportivo S5- contribuye a aquilatar en carretera el consumo de un modelo que, a base de tamaño y equipamiento, se acerca a los 2.000 kilos de peso en alguna de sus configuraciones. Y, de paso, el sistema mild hybrid permite sortear en nuestro país las limitaciones de circulación vigentes en muchas ciudades, entre otros beneficios de la ya mencionada etiqueta Eco.

Quede claro, por lo tanto, que el A5 Avant nos parece un vehículo, ante todo, rutero, capaz de devorar kilómetros sin inmutarse y especialmente sin que se inmuten quienes viajan en su interior gracias al extraordinario confort que proporciona, tanto de marcha como acústico, empañado este último por un mínimo rumor que se filtra al habitáculo procedente del áspero motor de gasoil. Los 204 CV de potencia disponible dan para desenvolverse con solvencia en cualquier situación, sea cual sea el terreno y el modo de conducción escogido por quien está a los mandos.
El consumo se sitúa en una media inferior a los 7 litros/100 km, y en carretera tiende más a bien a aproximarse a los 6: son registros bien asumibles para un automóvil de este porte, aunque alejados también de los 5,1 litros/100 km obtenidos en la prueba de homologación. Merced a los 60 litros de carburante que caben en el depósito -a los que hay que sumar 20 de AdBlue-, no es difícil viajar sin parar (a repostar) por espacio de 900 kilómetros.

Cambio de posicionamiento
Como apuntábamos al inicio, la fusión de los anteriores A4 y A5 da como resultado un modelo no solo más grande, sino sobre todo más tecnológico y refinado -también más caro- de lo que era el A4. Este cambio de posicionamiento, que volveremos a ver en un futuro A7 que integrará al A6 actual, entendemos que no causará mayor problema a los antiguos clientes del A5, pero podría alejar el coche de las posibilidades de quienes buscaban antaño un A4 sencillito.
Decimos esto porque ahora el catálogo correspondiente a la berlina parte de 51.050 euros, mucho dinero para un coche con motor de gasolina de 150 CV, etiqueta C y acabado Business, el más básico. Quien necesite el espacio de la carrocería Avant debe preparar un mínimo de 53.310 euros, y más de 56.600 si prefiere la versión TDI MHEV plus que hemos conducido nosotros.
Eso sí, a cambio de un desembolso que no es para todos los bolsillos, el usuario del nuevo modelo de Audi disfrutará de un auténtico cochazo, igual de bien rematado -si no más- que siempre, provisto de materiales discretos y elegantes, equipado con tecnologías punteras y concebido sobre todo para hacer kilómetros, solo o en familia, con toda la comodidad del mundo. Si no para viajantes, que cada vez quedan menos, el A5 es desde luego el coche idóneo para grandes viajeros.