Kia Niro PHEV, en el buen término medio

Mucho hemos escrito en esta web de Motor acerca del Kia Niro, un modelo digno de estudio por la manera en que se ha hecho un hueco considerable en el mercado sin que la marca hiciera en su momento ningún esfuerzo especial de marketing para conseguirlo. Uno de los secretos de su éxito es la variedad de sistemas de impulsión entre los que permite escoger, todos ellos electrificados desde su primera generación.

En la segunda, el coche ganaba atractivo exterior con respecto a su feíto predecesor y conservaba las virtudes que habían hecho posible su creciente popularidad. Básicamente, una notable amplitud interior y de carga pese a su tamaño contenido (mide 4,42 metros de longitud), la incorporación de tecnologías de última generación y la eficiencia de sus tres motorizaciones: 100% eléctrica, híbrida e híbrida enchufable.

En los últimos meses hemos publicado aquí pruebas del modelo eléctrico y del full hybrid, ambos muy recomendables, y ahora le toca el turno al híbrido enchufable (PHEV), que no nos parece menos aconsejable para un tipo muy concreto de usuario. Esta es, de hecho, la versión que más mejoras ha recibido coincidiendo con el cambio de generación, la más importante de las cuales es la introducción de una nueva batería de 11,1 kW con la que la autonomía en modo eléctrico se incrementa de forma significativa.

La potencia total asciende a 183 caballos, 105 CV de los cuales corresponden al motor 1.6 de gasolina y 62 kW los aporta el motor eléctrico al que alimenta la mencionada batería. El resultado es más que suficiente para mover con viveza un vehículo que pesa alrededor de 1.600 kilos en su variante más cargada de equipamiento, denominada Emotion. En este caso, el alcance eléctrico llega a 61 kilómetros, en el preceptivo ciclo WLTP, pero en los otros dos acabados disponibles (Concept y Drive) la cifra es de 65 km. En conducción exclusivamente urbana pueden recorrerse 84 km, según información de Kia.

La utilización real del coche reduce sensiblemente todas estas magnitudes, pero esto ocurre con todos los híbridos enchufables, de manera análoga a como el consumo real de todos los automóviles supera por bastante lo anunciado en sus registros oficiales, según ha constatado recientemente la Comisión Europea en un informe del que te hablamos en este artículo. En resumidas cuentas, con el Niro PHEV podremos hacer 45 o 50 km a lo sumo en modo eléctrico, y eso siendo mesurados en el uso del climatizador y cuidadosos con el peso del pie derecho sobre el acelerador.

Es cierto que ese margen puede ser suficiente para que un conductor cubra gran parte de sus desplazamientos cotidianos sin consumo de carburante ni emisiones locales y con un alto grado de confort acústico. Como nunca nos cansamos de repetir, todo depende de que tenga a su disposición un punto de recarga y, por supuesto, de que lo utilice antes de cada uno de esos trayectos porque, de lo contrario, tendrá un coche de gasolina más, y encima más pesado porque suma los componentes de un vehículo de combustión y los de otro eléctrico.

Para el usuario disciplinado, consciente de su huella ambiental -y que mira también por su bolsillo-, el Niro enchufable y que efectivamente es enchufado supone una de las mejores opciones que le ofrece el mercado actual, y además le permite disfrutar de los beneficios de la etiqueta 0 emisiones.

Puestos a soñar, tal vez en una futura generación del Niro PHEV veamos autonomías cercanas o superiores a 100 km como las que tienen algunos modelos, eso sí, de marcas premium y más caros que el Kia. Esos sí son enchufables realmente capaces de circular casi todo el tiempo en modo eléctrico, al menos a diario, quedando como siempre los viajes largos ya a cargo del motor de combustión que toque en cada caso.

¿Mejor no tocarlo?

Hay que reconocer que para obtener tal alcance eléctrico se necesita una batería que doble en capacidad a esta de 11 kW, lo cual conlleva un aumento del peso y del consumo eléctrico, y a su vez una reducción de la autonomía… Ante un círculo vicioso como este, tal vez sea justo admitir que el Niro PHEV está bien como está, en un equilibrio justo entre peso, prestaciones, eficiencia y, claro está, precio. Además, es el que más alcance eléctrico proporciona, sobre el papel y en conducción real, entre los que cabe considerar rivales directos, como el Citroën C5 Aircross Hybrid 180 o el Jeep Compass de 190 CV.

Ya que hemos mencionado el precio, el vehículo está a la venta desde 37.600 euros en el básico acabado Concept y cuesta 41.905 en el Drive y 44.150 en el Emotion. Para los clientes más exquisitos está disponible un Pack Premium que cuesta 2.700 euros adicionales y comprende todos estos elementos: head-up display, asientos delanteros ventilados y traseros con calefacción, asiento del conductor con función de memoria, asiento del pasajero tipo relax, equipo de sonido Harman Kardon y techo solar.

Para terminar con los inconvenientes habituales en los híbridos enchufables, en el Niro nos encontramos con un maletero que merma, hasta los 348 litros, con respecto a las demás versiones, que cuentan con 451 (el híbrido) y 475+20 bajo el capó si nos fijamos en el eléctrico puro o e-Niro.