El grupo Stellantis acaba de anunciar en un comunicado que el nuevo Dobló, el conocido comercial ligero de Fiat, se fabricará en su planta de Vigo, tanto en versión térmica como eléctrica. La nota señala escuetamente que el modelo se beneficiará de “los efectos de escala” y aprovechará el programa K9 “existente y exitoso que sirve a otras marcas” del consorcio.
En otras palabras, la factoría gallega unirá el Doblò a los otros tres comerciales ligeros de tamaño compacto que ya viene produciendo, es decir, el Citroën Berlingo, el Opel Combo y el Peugeot Rifter, así como sus correspondientes variantes de baterías, a las que a partir de ahora se sumará el E-Dobló.
De acuerdo con la estrategia adoptada en enero pasado, la versión de pasajeros estará disponible exclusivamente con motor eléctrico, en tanto que la de carga se venderá con propulsores de gasolina y diésel.
La quinta generación del modelo italiano adopta soluciones ingeniosas destinadas a hacer de la conducción en ciudad una experiencia menos estresante y más segura. Se trata del tercer modelo enteramente eléctrico de Fiat, tanto en su rama de pasajeros, que ya cuenta con los Fiat 500e y E-Ulysse, como en la profesional, donde ya militan E-Ducato y E-Scudo.
En su variante de trabajo, el Doblò se comercializará en dos longitudes y tres configuraciones diferentes (Van, Crew Cab, Combi). La fase de diseño ha prestado especial atención al confort que se desea para profesionales que utilizan el vehículo ocho horas o más al día. El objetivo es combatir el estrés a base de aislamiento acústico y una suspensión diseñada para reducir golpes y vibraciones.
En el E-Dobló, la introducción de la batería no supone ningún cambio estructural, de modo que el modelo tiene las mismas dimensiones, características y configuraciones que las versiones con motores de combustión térmica. La única excepción es que ofrece una carga útil de 800 kilos, que permite llevar dos europallets, mientras que las variantes térmicas pueden llegar a las dos toneladas de carga.
El Doblò eléctrico dispone de tres asientos individuales en la segunda fila que se pueden plegar para aumentar la capacidad de carga. Con el fin de garantizar la máxima seguridad de todos los pasajeros, el sistema Isofix para sillitas infantiles viene de serie en las tres plazas.
La impulsión del vehículo corresponde a un motor eléctrico de 100 kW o 136 CV alimentado por una batería de 50 kWh cuya autonomía en ciclo WLTP se ha situado en 280 kilómetros. La velocidad máxima se ha limitado a 130 km/h para preservar la capacidad de una batería que soporta un pico de potencia de 100 kW. En un punto de carga de corriente continua de estas características, el 80% de la energía se recupera en una media hora.
El E-Doblò debuta con una edición especial que incluye barras de techo Magic Window y llantas de aleación de 16 pulgadas, además de un exclusivo color Mediterraneo Blue. La gama completa estará disponible en los próximos meses.
Soluciones imaginativas
El modelo de Fiat presume de una larga serie de mejoras en materia de modularidad, sostenibilidad y seguridad. Entre las magic features encontramos el Magic Cargo, que permite un aumento de 0,5 m3 en el volumen de carga y la posibilidad de cargar objetos largos como tuberías o escaleras de hasta 3,4 metros. Además, es posible levantar el asiento del pasajero y usar el compartimento de debajo para cajas u objetos frágiles. También hay una bandeja giratoria para convertir la cabina en una pequeña oficina móvil cuando sea necesario.
El Doblò puede incluir asimismo un espejo retrovisor digital de 5“ que ofrece tres vistas diferentes: la de un retrovisor al uso, una vista completa del área del punto ciego y la de una cámara de estacionamiento trasera que mejora la visibilidad y la seguridad.
Por último, gracias al Magic Plug -solo en el E-Doblò-, podemos utilizar la energía eléctrica almacenada en la batería para necesidades específicas, como cargar la nevera de carga o un banco de trabajo para herramientas eléctricas.
El equipamiento de seguridad comprende un máximo de 17 dispositivos y ayudas a la conducción, entre ellos (en versión de pasajeros) el sistema de frenada de emergencia, el de mantenimiento en el carril y el monitor de atención del conductor. El modelo Van incorpora Grip Control System, para moverse con más solvencia en nieve, barro o arena, y un asistente de control de descenso para pendientes de más del 3%.
Por último, el head-up display proporciona al usuario la información más relevante que debe conocer sin distraerse de la carretera, y los sensores de estacionamiento delanteros y traseros, junto con la cámara posterior, facilitan las maniobras de aparcamiento.