De la ciencia ficción a `Girls´: el rodaje en Murcia de `Nikolina´

Es la hora de la comida y el equipo se repone del rodaje en la Sidrería Escondida, enfrente del lugar de grabación, el bar `Nikolina´, que en realidad es La Oveja Negra. Son las únicas personas que se dejan ver a las 15.30 de la tarde en la zona de las tascas de Murcia un 15 de julio. “Me voy a Tabarca esta tarde”, dice Gema, responsable del catering a las directoras, Nuria Muñoz y Eva Libertad García.

La llamada del mar en verano en Murcia es casi irresistible. Incluso para la protagonista Leo, interpretada por Marta Megías, quien a pesar de recluirse en su trabajo de camarera por un mal de amores, en un momento dado le da el aire en la playa de Bolnuevo, Mazarrón. “La verdad es que fue muy divertido porque se iba el sol y tuvimos los segundos exactos para poder grabar”, señala Marta, madrileña de 31 años con pareja murciana.

Pero Marta no está sola. El equipo lo componen 40 personas, entre técnicos y actores, más unos 15 figurantes. A veces incluso se duplican las tareas. “También he sido doble de manos”, comenta entre risas el foquista David Alzamora.

Porque a las directoras Nuria Muñoz (Murcia, 1975) y Eva Libertad García (Molina de Segura, 1978) se les fue de las manos la serie web que llevaban entre manos hasta llegar a la película `Nikolina´. Esta película tiene su origen hace seis años cuando la productora de Nuria, Nexus, consiguió una subvención para una serie web de ciencia ficción que finalmente no recibió por la crisis.

Hace dos años, de pronto, llegó el dinero, pero ya habían perdido los derechos de autor del guión que tenían, así que junto con Eva Libertad se embarcaron en la escritura de una nueva película de ciencia ficción, finalmente muy cara de rodar. A última hora compraron el guión `Noches de cóctel´ de Diego de León, que transformaron en `Nikolina´. “Hemos cambiado bastante la historia, el género de casi todos los personajes y, desde luego, el fantasma Yuri tiene mucha más presencia en nuestra versión”, desvela Eva.

La película mantiene elementos de fantasía unidos a un tono de comedia y drama con bastante inspiración de la serie norteamericana protagonizada por Lena Dunham `Girls´. “Las directoras están haciendo muy buen trabajo. A veces viendo el combo el equipo se emociona, se llora y se ríe, a pesar de que sabemos que estamos rodando”, dice Patricia Pérez, ayudante a dirección.

“No queríamos retorcer la carcajada ni hacer un dramón. Ha sido todo bastante orgánico”, apunta Eva Libertad, quien se ha encargado más de la dirección de actores de esta historia de superación de una camarera anclada en el pasado, aislada del contacto con los demás y con dificultades para disfrutar de la vida.

“En el fondo está la idea de superación del amor romántico, mostrar que el amor de pareja tradicional, fiel y heterosexual no es el único modelo”, apunta Nuria, a lo que Eva Libertad añade: “En la película se repite mucho la frase `no jugárselo todo a una carta´ en referencia a la pareja. Se trata de no centrar la idea de éxito y felicidad tan sólo en la pareja”.

Las propias Nuria y Eva Libertad son pareja. Con esta película quieren “lanzar preguntas” y contar que “no todos los escollos de la diversidad están superados”.

Mientras que Nuria ha estado más al cargo de los aspectos audiovisuales, Eva Libertad se ha encargado de la dirección de actores. Están contentas con la codirección, aunque mientras para Eva “el genio artísitico es un mito y la creación aglutina el trabajo de muchos”, Nuria cree que “al final alguien tiene que tomar las decisiones”.

Las directoras querían “un equipo con mujeres. Somos conscientes de que en el cine no se prodigan mucho las mujeres. Para ellas es más difícil encarar un rodaje muy intenso de dos semanas con las cargas familiares que además suelen tener”.

Para esta historia “sencilla, pero con la que muchas personas se sentirán identificadas”, Nuria y Eva Libertad han contado con un presupuesto que no alcanza los 100.000 €. “Hemos gastado poco en figuración y producción, para poder pagarle a todo el equipo”, cuenta Eva.

Tras la pausa de la comida, todos se ponen manos a la obra: la maquilladora tapa granos, el ayudante de dirección David Perea le da unas indicaciones a Marta, mientras que Nuria y Eva Libertad se sientan frente al combo -la pantalla donde se ven los planos- antes de que empiece la grabación. Pronto, a la playa dentro y fuera de la pantalla.