- Una petición en change.org lanzada el lunes 20 de agosto denuncia el recorte horario
“Voy casi todo los días con mi crío pequeño que tiene autismo a la sección infantil de la Biblioteca Regional. El recorte horario por supuesto que me afecta”, señala José Daniel Espejo, escritor y librero que ha lanzado el lunes 20 de agosto un change.org para evitar que la Biblioteca Regional de Murcia (BRMU) reduzca tres horas de apertura los sábados a partir de septiembre. El nuevo horario durante ese día del fin de semana será de 11.00 a 20.00h frente al antiguo de 9.00 a 21.00h.
Ni es la primera vez que intentan reducir los horarios de la Biblioteca los fines de semana ni la primera vez que se lanza una petición online para evitarlo. El primer recorte ocurrió en 2012 cuando el centro empezó a cerrar los domingos. Ese cierre fue contestado con una petición online y protestas durante meses que no surtieron efecto.
De nuevo en 2016 los presupuestos regionales redujeron la partida presupuestaria de la BRMU con la intención de cerrar los sábados, lo que iba a suponer el despido de 17 trabajadores. Tras una nueva petición online que logró 15.000 firmas y nuevas protestas en la puerta del edificio, el Gobierno regional se echó para atrás.
Hace casi un año saltó una nueva alarma cuando el sábado 30 de septiembre el centro no abrió sus puertas por la tarde hasta nuevo aviso. Finalmente la Consejería de Cultura confirmó la apertura de la BRMU los sábados por la tarde.
“Este recorte de tapadillo en agosto no muestra ningún respeto por el espacio y sus usarios”, dice Espejo por teléfono. “La acción cultural pública no debería estar enfocada a la espectacularidad y al servicio del turismo, sino que se trata de un derecho. Mientras que el Gobierno regional se empeña en decirnos que la economía murciana se ha recuperado, le declaran esta extraña guerra a la Biblioteca Regional”, añade.
“Es paradójico”, señala el escritor, “porque en Europa cada vez se amplían más los horarios de las bibliotecas por la noche y se entiende que es un lugar de ocio para los fines de semana”.
La Comunidad Autónoma informó el pasado viernes en una nota de prensa que el cambio “responde a ajustes en las horas del personal” y que “se ha realizado de forma que tenga la menor incidencia en el normal desarrollo de los servicios”. “Estadísticamente, de 10:00 a 11:00 horas y de 20:00 a 21:00 son las horas en las que los usuarios hacen un menor uso de los servicios que presta la biblioteca”, añaden.