La tasa de paro estructural en España se sitúa ya en el 18 %, seis puntos más que al inicio de la crisis, según un monográfico de mercado laboral de la patronal de agencias de empleo (Asempleo), que culpa de ello “a las rigideces del mercado laboral español”.
En rueda de prensa para presentar este monográfico, el presidente de Asempleo, Andreu Cruañas, ha explicado que en este 18 % no están sólo los parados de larga duración sino también un colectivo de jóvenes sin la capacitación suficiente demandada por el mercado laboral.
Cruañas ha advertido de que si la rigidez del mercado continúa, estos jóvenes parados pasarán a ser considerados de larga duración, y entrarían a formar parte de un colectivo “difícilmente empleable”.
El responsable de Asempleo ha recortado que España ha desinvertido en políticas activas y en I+D y ahora “hay que poner hilo en la aguja”, acometer medidas urgentes y facilitar la conexión de las ofertas laborales con la demanda.
Por su parte, el director técnico de Asempleo, Alex Costanzo, ha alertado de que en los próximos trimestres, marcados por subidas de salarios y precios, la tasa de paro estructural se puede agravar unas décimas y llegar en torno al 18,5 %.
Costanzo ha subrayado que si en España no hubiera habido crisis la tasa de paro estructural estaría muy por debajo, en el 12,3 %.
También ha explicado que entre el colectivo de jóvenes que peligrosamente se acercan al paro estructural, hay muchos 'ni-ni', que llegan a los 35 años sin adquirir experiencia laboral.
Por ello, una de las medidas que más urgen en España es elevar la inversión en formación para orientar a trabajadores y desempleados hacia los empleos del futuro, relacionados con la economía digital.
Se trataría de implementar medidas que fomenten la competitividad de las empresas, que mejoren la productividad y, por supuesto, una reforma profunda de las políticas activas.
En este sentido, el presidente de Asempleo ha abogado por conducir “mirando el retrovisor”, es decir, cualificando, facilitando la movilidad y activando los servicios públicos de empleo.
En definitiva, según Cruañas, se trata de “colocar a los desempleados” para proveer de capital humano a las empresas y estimular el talento pero también ha abogado por “conducir con las luces largas”, de forma que se pueda hacer una prospección de que profesiones funcionarán en el futuro.
Y para llevar a cabo estas reformas, Cruañas se muestra optimista y ve al Gobierno “más dispuesto” y, como ejemplo de esa disposición, ha citado la flexibilización de las condiciones para acceder a la Garantía Juvenil.
Para el responsable de Asempleo, el Ejecutivo tiene “voluntad política” y partidos como PSOE, Ciudadanos y alguno de los grupos minoritarios ya son “sensibles y conscientes” de la necesidad de estas reformas.
El monográfico también atiende a la situación de las comunidades autónomas y observa que el paro estructural ha experimentado un crecimiento superior en regiones como Andalucía, Madrid y Castilla-La Mancha, con tasas de paro más altas.
En comunidades con tasas de paro más moderadas, el aumento del paro estructural ha sido menor (País Vasco, Asturias, La Rioja y Cantabria).