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Opinión - ¿Misiles para qué? Por José Enrique de Ayala

Una madre emplea el veto parental para evitar que su hija asista a una visita del presidente de Murcia

María Martínez, madre de una alumna de 19 años, ha hecho uso del veto parental para evitar que su hija asista a una visita del presidente del Gobierno, Fernando López Miras, a un centro de FP. El jefe del Ejecutivo murciano tenía programado presentar este miércoles las 20 medidas prioritarias del Gobierno regional en materia de Formación Profesional en el Centro Integrado Carlos III de Cartagena.

Martínez, que en declaraciones a este medio ha tachado el llamado 'pin parental' de “vergonzoso”, consideró justo hacer uso de él para evitar que su hija asistiera al evento. La madre se acercó a la puerta del centro de formación a esperar a López Miras para hacerle entrega en mano de la misiva en la que no autorizaba a su hija a participar de la presentación presidida por el presidente de Murcia.

En este escrito alude a una discapacidad del 34% diagnosticada a su hija a los cuatro meses de nacer y que, según sus declaraciones, el Instituto Murciano de Acción Social (IMAS) había decidido suprimir cuando cumplió 18 años después de que “un psicólogo la atendiera durante diez minutos”.

La joven tiene hidrocefalia y es portadora de una válvula ventriculoperitoneal en el cráneo: “El hecho de quitarle dicha discapacidad a mi hija supone condenarla a cerrar el 50% de sus opciones de futuro, ya sean de educación o laborales”, señala María en la carta. “Bastantes problemas de carencias de materiales y personal hay en el centro, como para que vengan ustedes a hacerles perder clases”.

A raíz de la protesta, la madre asegura que los compañeros de su hija la están “insultando y maltratando” a través de un grupo de Whatsapp que tienen los estudiantes del curso. “Teníamos pensado sacarla del instituto más adelante porque no tiene suficiente capacidad de retención y memoria para el nivel en el que está, pero hemos decidido que mañana no vaya por el acoso y derribo que está sufriendo”.

El presidente de Murcia atendió finalmente el requerimiento de María y se comprometió junto con la consejera de Educación, Esperanza Moreno, a encontrar una solución alternativa a la situación de su hija.

Carta de María Martínez al Gobierno de Murcia

“Me dirijo a los señores gobernantes de la Región de Murcia, que según me ha informado mi hija vienen el día 19 de febrero a visitar el instituto en el que ella estudia. Mi hija tiene 19 años y hasta los 18 tenía un 34% de discapacidad (Su diagnóstico es hidrocefalia y es portadora de una válvula ventrículo craneal). Cuando cumplió los 18 años, en la correspondiente revisión de su discapacidad en el IMAS, un psicólogo que la atendió durante diez minutos, decidió quitarle totalmente la discapacidad, porque dijo que el cerebro de mi hija había madurado del todo.

Felicito al IMAS por los grandes profesionales que tiene, porque su diagnostico es contrario a todos los neurocirujanos que han visto a mi hija durante 19 años. El quitarle dicha discapacidad supone condenar a mi hija a cerrarle el 50% de sus opciones de futuro, ya sean de educación o laborales, por ello mi marido y yo estamos apoyando al máximo a mi hija en sus estudios. Bastantes problemas de carencias de materiales y personal, como para que vengan ustedes a hacerles perder clases.

Al día de hoy, mi hija es dependiente y yo soy su cuidadora y al ser mayor de edad ustedes me dirán que yo no tengo derecho a decidir sobre mi hija, pero como cuidadora legal lo tengo.

Haciendo uso del derecho que ustedes me han dado, no autorizo a mi hija a que pierda ni un solo minuto lectivo por su visita, sobre la que dicho sea de paso ni a mi hija ni a mí nos han explicado el motivo de la misma.

No obstante, les informo que en conocimiento de que el Estado Español ampara los derechos de mi hija y míos, voy a consultar con profesionales administrativos y legales para hacer valer el derecho a PIN PARENTAL, que ustedes nos han impuesto en la Región de Murcia. Sobra decir que mis acciones van contra ustedes“.