La portada de mañana
Acceder
Sánchez rearma la mayoría de Gobierno el día que Feijóo pide una moción de censura
Miguel esprinta para reabrir su inmobiliaria en Catarroja, Nacho cierra su panadería
Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

“La Iglesia debe pagar el IBI como lo pagamos todos los ciudadanos”

Queremos saber qué es y a qué se dedica Europa Laica, asociación de implantación nacional y de reciente desembarco en nuestra comunidad. Por eso hablamos con su coordinador en la Región de Murcia, Antonio Pagán Rubio (Murcia, 1970) quien también es abogado y mediador.

¿Qué es Europa Laica?

Es una asociación de ámbito nacional que trabaja por la separación entre Iglesia y Estado. Luchamos por sacar la religión de la escuela pública y por conseguir que el espacio público, que es de todos, no esté dominado por las religiones, en España fundamentalmente por la religión católica, porque es la mayoritaria... Pero nosotros nos referimos a todas las religiones.

Acaban de abrir su Delegación en la Región de Murcia. ¿Se van a a ocupar de asuntos de aquí o de cuestiones de carácter general?

La asociación surge en Murcia para llamar la atención sobre aquellas facetas que entendemos que son invasivas aquí, por parte de la religión en lo público. Nuestro propósito es defender los derechos ciudadanos por encima de los religiosos.

¿Por ejemplo?

Hace muy poco, por ejemplo, en el Observatorio del Laicismo y en nuestra propia web se puede ver una noticia publicada en los medios de comunicación, en la que se detallaba cómo los estudiantes de Medicina de la UMU no tenían suficientes plazas y esto beneficiaba a la Universidad Católica. Nosotros lo denunciamos. Otro ejemplo sería que el dinero público se entregue a la Iglesia para arreglo de sus inmuebles. Creemos que esas obras se deben sufragar con dinero de la Iglesia, que ya recibe por otra parte una buena suma de los Presupuestos Generales del Estado.

Habrá quien piense que están ustedes en contra de la religión.

En absoluto, nosotros respetamos todos los credos. No vamos a quitar la religión, ni vamos a cargarnos las iglesias y los santos... Todo lo contrario. Respetamos muchísimo las creencias de cada persona pero creemos que esas creencias se deben circunscribir al ámbito de lo privado. Yntendemos que actualmente hay una serie de cuestiones de orden religioso que están invadiendo la gestión de lo público.

Nuestro país es aconfesional. ¿No es suficiente para Europa Laica?

Que España sea aconfesional lo dice la Constitución del 78, y significa básicamente que a priori no hay una confesión religiosa que determine el dominio de la fe en todo el territorio nacional. Sin embargo, con eso se juega. En realidad estamos viviendo en una sociedad que a través de las leyes está haciendo de la religión, Estado, mezclándolo todo. Así lo demuestra la presencia de crucifijos en actos de juramentos de cargos públicos, o que los políticos salgan en las procesiones... Es decir, que con la excusa de que es tradición, se utilizan cuestiones religiosas para invadir la esfera pública. Ser un estado laico es otra cosa. Es lo que decía la Constitución de 1931 en su artículo 26, “que España será una sociedad laica y que por tanto habrá libertad de conciencia”. En definitiva, el laicismo lo que dice es que cada uno crea en lo que quiera pero en su ámbito particular, y que estas creencias no interfieran la vida pública, donde nos encontramos todos. Y ahí no puede ni debe predominar ninguna creencia sobre otra.

¿La Iglesia debe, según ustedes, pagar impuestos como por ejemplo el discutido IBI?

Nosotros defendemos que la Iglesia pague el IBI como todo el mundo que posee un inmueble, y así se lo estamos trasladando a los partidos políticos para que lo tengan en cuenta. Entendemos que hay que modificar la ley para que la Iglesia no esté exenta del pago de este impuesto, teniendo como tiene innumerables propiedades. Es una obligación fiscal para todos los ciudadanos de a pie y debe serlo también para la Iglesia.

Frente a esta idea de Europa Laica, hay quien piensa que la Iglesia no debe pagar impuestos porque realiza una importante labor social de ayuda a los más desfavorecidos, y más ahora en tiempos de crisis.

En realidad esto no es así. La Iglesia católica recibe para fines sociales un importante presupuesto, y es con ese presupuesto con el que realiza su función social. En realidad no es la Iglesia quien financia esta tarea, somos todos los ciudadanos los que aportamos los fondos que utilizan para llevar adelante estas prestaciones, que si no las hiciera la Iglesia las prestarían otras organizaciones con fines sociales que también se dedican a ello y que podrían hacerlo incluso mejor. No está nada claro que el dinero que se le entrega a la Iglesia para este fin sea empleado en eso.

¿Qué piensan ustedes de los acuerdos con la Santa Sede, que gobierno tras gobierno, y gobierne quien gobierne, España sigue sin derogar?

Deberían terminar. La Iglesia recibe mucho dinero también por los concordatos con la Santa Sede, que están muy bien atados y cerrados y que permiten que siga recibiendo toneladas y toneladas de euros de todos los españoles, seamos creyentes o no.

Sobre este asunto de la religión pasa quizá que hay quien teme pronunciarse. Tanto, que se sigue por parte de la gente en la mayoría de los casos la norma o la tradición, en cuanto a celebraciones como por ejemplo de bautizos, comuniones, bodas... ¿Se puede ser creyente, practicante incluso, y defender laicismo igual que si uno es ateo o agnóstico?

Por supuesto. En nuestra asociación hay redes cristianas que están en contra de cómo la cúpula eclesiástica está metida en las costillas del Estado. Nosotros trabajamos por la libertad de conciencia. Cada uno que haga lo que quiera y crea en lo que quiera. En Europa Laica hay personas muy religiosas, y practicantes en su ámbito privado, contrarias a la invasión de lo público.

¿Qué acciones piensan poner en marcha en la Región de Murcia?

Pronto celebraremos nuestra presentación oficial en Murcia, en nuestro local de reunión. Vamos a programar cursos sobre el laicismo, presenciales y online, y jornadas informativas para acercarnos a la sociedad. Y a diario estamos pendientes de hacer públicas denuncias concretas en el Observatorio del Laicismo en Internet, máxime ahora que en nombre de un Dios creador se está impidiendo a las personas disfrutar de su libertad. Y no estoy hablando de la religión católica.

Una cosa más: ¿Es muy difícil la apostasía?

Mucho. Es más difícil darse de baja de la Iglesia que cambiar de compañía telefónica... Debe ser porque a mayor número de inscritos como bautizados, mayor cantidad de dinero se recibe del Estado.

 

Con la excusa de la tradición se utilizan cuestiones religiosas para invadir la esfera pública