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Medio centenar de accidentes laborales al día de enero a julio en la Región

Erena Calvo

Murcia —

Son muchas veces las víctimas olvidadas de la sociedad, los afectados por los accidentes laborales. “Parece que se asumen con naturalidad, como si fuera el precio que se puede terminar pagando por tener un puesto de trabajo, pero llegar sano y salvo a casa es un derecho inalienable”, afirma un funcionario del Instituto de Salud y Seguridad Laboral (ISSL) de la Región de Murcia.

El organismo, según ha denunciado Podemos, ha quedado “prácticamente desmantelado” tras los recortes presupuestarios de 2017.

“Presupuesto a presupuesto se mata al Instituto que debería velar por la prevención de riesgos laborales en la Comunidad”; de hecho, según fuentes consultadas la plantilla de técnicos se ha visto reducida casi en un 50 por ciento en los últimos años.

“El órgano que debería ser el alma mater de la Región en esta materia está muy tocado”, critica Enrique Mirabet, Presidente de la Asociación de Enfermeros del Trabajo.

Según las estadísticas (accidentes de trabajo con baja o por muerte por cada cada 100.000 afiliados a la Seguridad Social con cobertura por contingencia de accidente), la Región de Murcia se sitúa por encima del índice estatal para el total de accidentes de trabajo con baja: un índice de 3.276 frente a la media estatal del 3.189,5 en 2015. Esto sitúa a la Región de Murcia en la octava posición de aquellas Comunidades autónomas que están por encima de la media estatal.

Si se analiza el índice de incidencia de los accidentes laborales mortales, la realidad es todavía “más negativa”, señalan desde Podemos. En 2015, dicho índice en la Región fue del 4,49, muy por encima de la media estatal, que fue del 3,55. En este sentido, la Región de Murcia ocupa la sexta posición entre las comunidades autónomas con mayor índice de accidentes de trabajo mortales.

Además, se incrementó en un 8 por ciento el índice de incidencia de los accidentes de trabajo en 2015 respecto a 2014. Y en 2015 se registraron 11.553 accidentes de trabajo con baja en jornada laboral frente a los 14.267 de 2016.

Víctimas mortales

En los accidentes mortales también hay una evolución creciente, pasando de los 13 de 2012 a los 33 de 2016. De enero a julio de este año se han producido ya 16 accidentes mortales en la Comunidad, y 11.271 registrando todas las categorías (leves, graves y mortales), lo que da una media de 53 accidentes al día en la Comunidad.

Las cifras de 2017 solo han sido publicadas por el Ministerio de Trabajo. En la Región se publicaron únicamente hasta el mes de febrero. Hecho que ha sido denunciado por Podemos, que se pregunta “si este es el interés del Gobierno regional en la política de prevención de riesgos, ¿Cómo se va a hacer una política efectiva sin conocer los datos de la realidad de los accidentes?; es bochornoso”.

Para el presidente de la Asociación de Enfermeros del Trabajo es una situación difícil de comprender porque, asegura, los datos de accidentes están a tiempo real al día siguiente y se pueden estudiar en un plazo de unas pocas semanas. “Ni siquiera han publicado la memoria anual de siniestralidad laboral de 2016”.

La memoria de actividades del pasado ejercicio está previsto que se presente mañana en una reunión del Consejo asesor regional de seguridad laboral, según informa Antonia Martínez, de Comisiones de Obreras (CCOO).

Nuria Fuentes, directora general de Relaciones Laborales y Economía Social, reconoce que este 2017 solo se han publicado datos de siniestralidad hasta febrero porque, según afirma, en su departamento están realizando un análisis “pormenorizado” con las cifras de 2016 “para observar bien los problemas reales, analizar las causas, los tipos de accidentes y ver en qué tenemos que incidir para preparar todas las actuaciones de 2018”.

En su opinión, “es importante saber qué actuaciones vamos a poner en marcha todos los que estamos implicados; lo primero es frenar y reducir la siniestralidad”. Y no descarta la elaboración de un plan estratégico de riesgos laborales en la Comunidad, tal y como han propuesto algunos sindicatos y partidos políticos.

En cuanto al incremento de accidentes laborales, Fuentes apunta que han aumentado en toda España y que “ahora hay más población activa y esa variable influye, hay una probabilidad mayor”. Aunque “no tenemos que buscar excusas, sino soluciones”. E insiste en que no es un problema individual “de una administración”, más cuando hay otros agentes que “están recibiendo subvenciones”.

300.000 euros a sindicatos

Unas subvenciones a los sindicatos que han pasado de los 30.000 euros en los últimos años a los 300.000 de 2017, la única partida que se ha ampliado en materia de riesgos laborales en la Región.

Para Enrique Mirabet, presidente de la Asociación de Enfermeros del Trabajo, la problemática de Murcia en cuanto a siniestralidad “no se cura solo dando subvenciones a los sindicatos, hay que hacer partícipes de estas políticas a otros agentes como las sociedades científicas de medicina o a los colectivos de afectados por enfermedades del trabajo”.

Y se lamenta de la “inacción del Gobierno regional” y de la ausencia de propuestas en la Asamblea regional, “que siempre son lanzadas por Podemos, Psoe o Ciudadanos”.

Antonia Martínez, de Comisiones Obreras, recuerda que a pesar de que la siniestralidad laboral descendió mucho, “en los últimos años está repuntando de nuevo”. Y da tres motivos: Los recortes y ajustes de gasto; las reformas laborales de 2010 y 2012 y la temporalidad en trabajos precarios.

La última reforma de 2012 eximía a los empresarios con menos de 25 trabajadores a asumir riesgos en materias laborales, con lo que podían prescindir de técnicos especializados en la materia. Esto englobaba a un grupo enorme de compañías en España, que cuenta con un 95 por ciento de pequeñas empresas.

Esta problemática se tiene que resolver “a pie de empresa”, señalan desde Comisiones, donde forman a sus delegados para que incidan en el cumplimiento de la ley de prevención de riesgos por parte del empresario, y se visitan los centros de trabajo para inspeccionar sus dependencias, elaborar informes e instar a que se subsanen deficiencias.

Para Podemos es imprescindible un pacto para la contención de los accidentes de trabajo. “Lo estamos reivindicando desde que entramos en la Asamblea regional; pero en ninguno de los cinco acuerdos que ha propuesto el Gobierno regional a la oposición se contemplan los accidentes laborales”.

La formación morada ha constituido un grupo de trabajo con sindicatos y asociaciones profesionales, y tienen previsto presentar un manifiesto en el mes de octubre. Entre sus reivindicaciones se encuentra la necesidad de que el Instituto de Seguridad y Salud Laboral sea dotado del suficiente presupuesto como para que vuelva a ser la autoridad pública en la prevención de riesgos laborales.

Enrique Mirabet coincide. “Hay que reactivar el instituto como eje de la prevención, hay muchas carencias técnicas y de recursos humanos; la cultura preventiva debe nacer desde dentro y los números de siniestralidad no deben ser los números de la vergüenza sino unas cifras que nos hagan trabajar en serio”.