Todo indica que el camino a San Esteban del delfín de Valcárcel, Pedro Antonio Sánchez, se va a despejar en breve. Su desimputación en el proceso judicial que mantiene en vilo su candidatura a la presidencia de la Comunidad Autónoma de Murcia, encabezando la lista del Partido Popular a las eleciones autonómicas de mayo, es inminente.
Tan inminente que bien pudiera ser a principio de la semana próxima cuando el magistrado del Tribunal Superior de Justicia de Murcia, Julián Pérez Templado, dicte una resolución definitiva en cuanto a la investigación abierta sobre la compra de un dúplex por el exalcalde de Puerto Lumbreras, tras llegar a la conclusión de que en esa operación inmobiliaria no sucedió nada ilegal.
Libre por tanto de la posible acusación por la comisión de un delito, Sánchez podrá será proclamado candidato sin problemas por la dirección nacional del PP, toda vez que la cúpula de Génova le dio el visto bueno durante la reciente Convención Nacional del Partido Popular celebrada en la capital de España, y que Ramón Luis Valcárcel, por su parte, lo ha señalado siempre como el elegido para ser su heredero.
Así las cosas, las pretensiones de Alberto Garre de presentarse a la reelección se quedan en nada, dándose además la circunstancia que lo afirmado y exigido por el presidente del Gobierno regional, al que hasta los suyos ya le llaman “el breve”, se va a cumplir: “Imputados en las listas, no”.
Todo indica que el camino a San Esteban del delfín de Valcárcel, Pedro Antonio Sánchez, se va a despejar en breve. Su desimputación en el proceso judicial que mantiene en vilo su candidatura a la presidencia de la Comunidad Autónoma de Murcia, encabezando la lista del Partido Popular a las eleciones autonómicas de mayo, es inminente.
Tan inminente que bien pudiera ser a principio de la semana próxima cuando el magistrado del Tribunal Superior de Justicia de Murcia, Julián Pérez Templado, dicte una resolución definitiva en cuanto a la investigación abierta sobre la compra de un dúplex por el exalcalde de Puerto Lumbreras, tras llegar a la conclusión de que en esa operación inmobiliaria no sucedió nada ilegal.