'Patrulla Animal' es un espacio coordinado por Elisa Reche en el eldiario.es Murcia, para defender los derechos de los animales como seres sintientes.
Condenada a pagar 2.155 euros de indemnización por no cambiar la titularidad del microchip
En este post voy a comentar el caso Acen: quien lo encontró ha tenido que pagar 2.155 euros de multa por no haber cambiado el nombre del microchip de este perro que rescató de la calle.
Acen era un perrito mestizo, el cual deambulaba abandonado por las calles de Granada. Katy, una holandesa que pasa con frecuencia varios meses de vacaciones en Granada, lo recogió de la calle, estando el pobre animal literalmente en los huesos y comido de garrapatas.
Katy lo llevó al veterinario. Allí comprobaron que no tenía microchip y comentaron que no habían visto antes a ese perro por su clínica. Katy lo cuidó y pocas semanas después, al ver que nadie lo reclamaba, le puso el microchip a su nombre. Como en breve regresaba a Holanda, decidió buscarle una adoptante a Acen. Lamentablemente, nadie se interesó por él porque se trataba de un perrito mestizo de tamaño mediano y no tuvo suerte.
Finalmente, Katy localizó a una protectora de animales de Murcia cerca del municipio de San Javier y acordó entregarles al perrito Acen para que le encontraran una buena familia.
Katy regresó a su casa de Holanda sin tener más noticias sobre Acen y sin la protectora de animales. Casi un año después cuando Katy regresó de nuevo a España a su residencia de vacaciones en Granada se llevó una desagradable sorpresa ya que tenía una carta de un juzgado de primera instancia de Murcia que le había condenado a abonar 1.605,27 euros, más los intereses legales y costas en concepto de los daños materiales ocasionados por el perrito Acen a un vehículo.
Resulta que el perrito Acen se le escapó a algún voluntario de la protectora de animales y se vió involucrado en un accidente con un coche. Lamentablemente Acen falleció en ese accidente.
La compañía de seguros abonó al propietario del vehículo todos los gastos para reparar los daños materiales que sufrió en su vehículo porque tenía el seguro del coche a todo riesgo. Poco después la aseguradora reclamó al titular del microchip del perro todos los gastos abonados al conductor del vehículo. La protectora de animales no hizo el cambio de microchip cuando recepcionó a Acen y el chip seguía a nombre de Katy. La holandesa no se había enterado de este caso ya que el juicio se celebró sin haber sido citada correctamente y estando ella en su país de origen.
Casualidades de la vida, un día que quedé a tomar café con una amiga que tenemos en común Katy y yo, me enteré de toda historia. “¡Pobre mujer¡”, pensé. “Rescata un animal de la calle, lo cuida, se gasta dinero para que se ponga bien, le busca una protectora de animales y de premio, le condenan a pagar más de 2.000,00 euros, en total (entre la cuantía reclamada por la aseguradora, los intereses y las costas)”.
Comentando este caso con otro compañero abogado nos dimos cuenta que posiblemente esta sentencia podía haber sido anulada por no haber sido notificado correctamente el juicio a Katy. Mi compañero así se lo hizo saber a esta señora, pero la pobre estaba tan abrumada entre la noticia de que el perrito que había rescatado atropellado había muerto y que había sido condenada por un juez que decidió de forma voluntaria abonar todos los gastos que estimó el juez en su fallo.
La puse en contacto con el abogado de la aseguradora y éste le pasó una cuantía total a pagar de 2.155 euros por todos los conceptos citados (reparación del coche, intereses y costas – gastos de abogado y de procurador de la aseguradora-).
Muchas veces nos movemos con el corazón al rescatar animales y obviamos temas legales, de ahí la importancia de que cuando rescatemos a algún animal, adoptemos o tengamos uno, aunque sea temporalmente, nos aseguremos de que nuestro seguro de hogar cubre la responsabilidad civil de los daños causados por éste, a terceros (personas y/u otros animales) o, en su defecto, le hagamos un seguro especial para animales, conocido popularmente como seguro de R.C. (responsabilidad civil para mascotas).
Y sobre todo, es muy importante que cuando entreguemos un animal en adopción o cesión definitiva a un tercero o protectora de animales hay que acordarse de realizar el cambio de microchip a favor de la persona que vaya a hacerse cargo del animal.
En el caso de Katy, el responsable del accidente y de abonar todos estos gastos era el poseedor de Acen (es decir, la protectora de animales que lo tenía) ya que el código civil dice textualmente en su artículo 1.905 que el responsable de los daños causados a terceros el poseedor del animal, aunque se le escape o extravíe, salvo que el daño causado proviniera de fuerza mayor o de culpa de quién lo hubiese sufrido.
En este caso es más que probable que ni el conductor del vehículo accidentado ni su aseguradora tuvieren conocimiento de quién tenía la posesión de Acen, por lo que tras ocurrir el accidente le pasarán el lector de microchip al perrito Acen ya fallecido, con tan mala fortuna para Katy de que el microchip estuviera todavía a su nombre.
De este caso podemos extraer dos conclusiones:
El titular en el microchip de un animal debería tener un seguro que le cubra los daños pro responsabilidad civil de sus animales. (Y también el poseedor de un animal, aunque no sea el titular del mismo en el microchip).
Cuando se cede o entrega definitivamente un animal a otra persona o entidad debe hacerse el cambio de microchip a favor de quien se vaya a hacer cargo del animal.
Por ejemplo, en mi caso estoy tranquila en cuanto al tema económico por posible responsabilidad civil derivada de mis animales ya que tengo un seguro de responsabilidad civil muy amplio dentro de mi seguro de hogar que me cubre los daños a terceros de mis animales.
Querido lector, si tienes alguna duda legal o algún caso para comentar jurídicamente puedes contármelo, te contestaré mediante un post similar a éste, puedes contáctarme a través de mi web www.deanimals.com
Puedes leer más sobre este tema, en el artículo de este blog “ ¿Qué responsabilidad tiene el propietario de un animal de compañía?
En este post voy a comentar el caso Acen: quien lo encontró ha tenido que pagar 2.155 euros de multa por no haber cambiado el nombre del microchip de este perro que rescató de la calle.
Acen era un perrito mestizo, el cual deambulaba abandonado por las calles de Granada. Katy, una holandesa que pasa con frecuencia varios meses de vacaciones en Granada, lo recogió de la calle, estando el pobre animal literalmente en los huesos y comido de garrapatas.