Abstención juvenil y menos voto urbano, las causas del descenso de Unidos Podemos

El sabor amargo tras las elecciones sigue en la cúpula de Podemos Región de Murcia. El único representante de la coalición en el Congreso, Javier Sánchez Serna, junto a la Secretaria de Organización Mª Ángeles García Navarro y el Secretario General Óscar Urralburu han analizado los resultados y han achacado el descenso de votos a la abstención y a la “desmovilización de los sectores más dinámicos de la sociedad, como los jóvenes y la población de las grandes ciudades y núcleos urbanos”.

Sin embargo, Sánchez Serna ha querido desdramatizar los resultados y ha valorado que los 71 escaños de la coalición la “consolidan como tercera fuerza política”. Respecto a los datos, Unidos Podemos considera que hacen falta estudios “más cuantitativos y más científicos”, por lo que la formación va a encargar un estudio demoscópico “serio” en la Región de Murcia que revele qué sectores se desmovilizaron y detecten las diferencias entre los comicios del 26 de junio de 2016 y los del 20 de diciembre de 2015.

“Nosotros tenemos la intuición de que se ha desmovilizado la parte más dinámica de la sociedad, que han sido los jóvenes, y que se movilizó más el voto de siempre, del bipartidismo”, aseguraba el cabeza de lista, quien cree que el voto del cambio “se quedó en casa o en la playa”, por lo que la formación morada va a trabajar en los próximos meses por recuperarlo.

Podemos ha perdido electores en casi todos los municipios importantes: en Molina de Segura ha perdido 2.000 votos; Lorca ha perdido en torno a otros 2.000 votos, Murcia ha registrado cerca de 10.000 votos menos; y Cartagena unos 5.000 votos menos. “Nadie sabe exactamente lo que ha ocurrido, pero no situamos en torno a la caída del 3,9 por ciento que es, precisamente, lo que se buscaba sumar”, ha explicado Óscar Urralburu, quien cree que la “campaña del miedo” del Partido Popular “ha funcionado”, arrastrando el “voto rural y de las personas mayores”.

Rol preocupante del PSOE

A los dirigentes de la formación morada les preocupa seriamente la brecha que separa hoy en día a su partido, y electorado, del Partido Socialista y los suyos. “Ha desmovilizado a todo el electorado progresista partiendo de la absoluta ingobernabilidad que se iba a producir si ascendía Podemos”, afirma el propio Urralburu. Para el líder regional las críticas del PSOE han beneficiado al Partido Popular, “apuntalando” su mayoría.

Respecto a las encuestas, Urralburu ha recordado que entre las realizadas en el mes de enero y después de la votación de la confluencia, “no había variación significativa”, por lo que “no parece que la confluencia haya sido determinante” en las encuestas pero “sí en el resultado final del 26 de junio”.

Por otra parte, Urralburu ha admitido que el resultado “podría ser” un castigo por no haber llegado a acuerdos durante la primera vuelta ya que “está demostrado que las segundas vueltas sí que fatigan al electorado y pueden incorporar un voto de castigo”. De hecho, reconoce que el voto joven “ha podido percibir que Podemos no ha hecho la suficiente apuesta por lograr un gobierno de cambio”.

Respecto a la posibilidad de asumir responsabilidades. Los dirigentes morados analizarán primero “los datos cualitativos” y dejarán en manos de los órganos internos la tarea de juzgar responsabilidades.