“Tendremos que decidir entre corrupción o dignidad, dignidad que, para algunos diputados, sí tiene un precio y es de 76.000 euros brutos anuales y un chófer en la puerta de su casa”, ha afirmado en una comparecencia Ana Martínez Vidal, la coordinadora de Ciudadanos en Murcia y candidata a la presidencia en la moción de censura presentada por su partido junto con el PSOE para desbancar al PP del Gobierno de la Región. La votación de la moción de censura sigue adelante en Murcia.
“Los seis diputados de Ciudadanos firmaron libre y voluntariamente en una reunión de más de dos horas. Ninguno de ellos manifestó entonces estar en contra de la moción de censura”, ha recordado Martínez Vidal.
“Los que hoy han dado este paso, tendrán que retratarse ante todos los murcianos. Nuestros afiliados y votantes sienten vergüenza ante esta subasta de voluntades”, ha añadido en referencia a los tres diputados naranjas tránsfugas. Isabel Franco, Francisco Álvarez y Valle Miguélez han apoyado al jefe del Ejecutivo murciano, Fernando López Miras, a cambio de permanecer en la vicepresidencia la primera y de obtener las carteras de Empleo y Empresa, el segundo y la tercera, respectivamente.
Martínez Vidal ha insistido en que Murcia está “asolada” por la corrupción del PP, partido que ha gobernado la Región durante 26 años, y ha puesto dos ejemplos recientes: el escándalo de la vacunación fuera de protocolo del antiguo consejero murciano de Salud Manuel Villegas y 600 altos cargos de la consejería y del Servicio Murciano de Salud, como los presuntos contratos irregulares firmados por el Ayuntamiento de Murcia, actualmente investigados por la UDEF.
La coordinadora naranja ha subrayado el intento de Ciudadanos para propiciar un cambio en “el modo de entender la política”, pero “con el PP ha sido imposible, nos han robado esa posibilidad”.
Martínez Vidal también ha dicho que desde ayer los cuatro concejales del Ayuntamiento de Murcia y los diputados regionales del partido naranja cuentan con protección policial del Ministerio del Interior “ante posibles ‘escraches’”. “El seguimiento, las amenazas y el acoso a Ciudadanos en esta Región es el triste resultado de luchar y denunciar la corrupción”, ha añadido.