El negociador de Vox en la Región de Murcia, Luis Gestoso, ha afirmado que el partido renuncia a algunas de sus exigencias más polémicas, como la revisión de la Ley LGTBI. En una rueda de prensa celebrada en el Hotel NH Amistad, el partido de extrema derecha también ha anunciado que ya no es imprescindible que Ciudadanos firme un documento de “acuerdo de investidura”, que Vox enviará a la formación naranja y al PP con los puntos que han consensuado a lo largo de estas últimas reuniones que han mantenido. “No hace falta rúbrica. Somos un partido que cumplimos con la decencia y con la palabra dada”, ha dicho Gestoso, al mismo tiempo que ha señalado que los encuentros con PP y Cs han sido cordiales y ha agradecido la “predisposición” de ambos en este proceso.
Con esta cesión, Vox pretende acelerar la formación de un Gobierno en la Región de Murcia y desbloquear la investidura del popular López Miras, que ellos mismos tumbaron el pasado 4 de julio. Gestoso, acompañado de los cuatro diputados regionales de la formación de ultraderecha, ha declarado que todavía no tiene una confirmación de PP y Cs: “Esperemos que estén de acuerdo porque nos hemos centrado en las propuestas que tenemos en común”.
“Estaremos en la oposición y desde ahí defenderemos nuestro programa”, añadió el negociador regional de la formación de ultraderecha.
El negociador de Vox apuntó que la respuesta de PP y Cs podría producirse en “horas”, de modo que el próximo lunes podría tener lugar una nueva ronda de consultas para convocar el segundo intento de investidura del popular Fernando López Miras antes de acabar este mes .
El partido de ultraderecha no retira de sus propuestas el término de “violencia intrafamiliar” que sustituye al de violencia machista, una de las cuestiones más polémicas de su ideología política. “Nos comprometemos a desarrollar programas de prevención de cualquier tipo de violencia intrafamiliar”, dice uno de los puntos situado dentro del epígrafe Libertad.
Por otra parte, Vox ha vuelto a reincidir en su petición de revisar la creación de centros para albergar a menores extranjeros, conocidos como `menas´ y han expresado su rechazo específico a la apertura de este tipo de centro en la pedanía murciana de Santa Cruz. “Es un lugar con 1.500 habitantes y no hay comisaria de policía o servicios de salud para la seguridad de los vecinos y de los muchachos”, dijo Gestoso a este periódico.
Consentimiento de los padres para “la educación moral” de sus hijos
Los de Abascal tampoco abandonan sus exigencias en materia educativa, como la “libre elección de los padres” para evitar el “adoctrinamiento en las aulas”. De esta forma, el partido de ultraderecha exige la garantía de que haya un consentimiento expreso de los progenitores a “enseñanzas, talleres o actividades escolares no regladas relacionadas con contenidos éticos, sociales, cívicos, morales o sexuales”, como puedan ser las charlas de educación afectivo-sexual que el gobierno regional prohibió el año pasado ante las presiones de las asociaciones ultracatólicas.
El presidente de la formación en Murcia, Pascual Salvador, añadió que la enseñanza en los centros educativos públicos está “muy politizada” y que los hijos de los agricultores en el Mar Menor“, de militares o de políticos de Vox tienen que enfrentarse a problemas con profesores ”podemitas“.
Otra de sus exigencias educativas supone la incorporación del conocimiento “de la aportación de España a la civilización como elemento clave de la Historia Universal”.
La reducción de impuestos de la Región “al máximo posible” y la elaboración de un Plan Hidrológico Nacional son otras de las propuestas que Vox ha vuelto a plantear para la investidura de López Miras.