El objetivo de la comparecencia del Gobierno de la Región de Murcia en pleno, con su presidente Alberto Garre a la cabeza, era hacer balance de su gestión durante 2014 y apuntar las líneas futuras a desarrollar. Pero como acto seguido se ha abierto el turno de preguntas de los periodistas, y la corrupción sigue ocupando los primeros puestos entre las preocupaciones ciudadanas, Garre no ha tenido más remedio que responder a cuestiones relacionadas con la presencia de imputados en las listas del PP o con los mecanismos de funcionamiento interno de su partido.
Tras conocerse el patrimonio del alcalde de Murcia, Miguel Ángel Cámara, imputado en el caso Umbra –y tras saberse también que el propio Cámara se ve capaz de seguir en el cargo en la próxima legislatura–, se le ha preguntado al presidente de la Región de Murcia si sería bueno para el PP llevar imputados en sus listas de cara a las elecciones del próximo año. “¿Cómo va a ser bueno, si llevo toda la mañana diciendo que el pueblo tiene que ir por delante de la ley?”, ha expresado con énfasis Garre. Y ha insistido: ¡Cómo voy a negar lo que dicen las encuestas y lo que piensan la mayoría de los ciudadanos!“.
Alberto Garre no ha querido dar su opinión respecto a dónde situar las líneas rojas que él mismo cree imprescindibles –“serán las que fije el Congreso de los Diputados”–, y también ha eludido “juzgar a nadie” esgrimiendo el principio de presunción de inocencia. Sin embargo, considera imprescindible que tanto los partidos como las regiones se pongan de acuerdo en marcar los límites porque, en su opinión, no puede ser “que se hagan unas cosas en un sentido en una provincia, y en la provincia de al lado se hagan otras”. En ese sentido, Garre ha defendido que “en esto” también es necesaria la cohesión y la coordinación.
Aunque no quiere juzgar a nadie, Garre ha aprovechado para citar una palabra que considera fundamental: “generosidad”. Y ha puesto como ejemplos a la alcaldesa de Alicante y a la exvocal por CiU en el Consejo General del Poder Judicial, Mercé Pigem. “Al votar, entre el ciudadano y el gobernante se establece un compromiso basado en la confianza”, ha explicado Garre, para quien “las elecciones son precisamente eso, un contrato de confianza” dentro del cual no cabe la más mínima sospecha.
“Nuestro modelo funciona, y no nos ha ido mal”
Ante las preguntas de si cree que será suficiente con las medidas adoptadas por el Gobierno para favorecer la transparencia y la participación ciudadana, y si no considera que los ciudadanos también están exigiendo mayor transparencia y democracia interna en los partidos, Alberto Garre ha defendido la metodología del PP. “Cada partido tiene sus fórmulas para hacer partícipes a sus afiliados o a la sociedad en la manera de gobernarse, y nosotros tenemos nuestros estatutos y nuestro modelo, y no nos ha ido mal con eso”, ha dicho el presidente.
“Yo conozco otras fórmulas como las elecciones primarias, es verdad”, ha proseguido Garre, “y sé de unas primarias en las que resultó elegido Borrell y al final el candidato fue Almunia”. “A partir de ahí, que alguien me explique para qué sirvieron esas primarias”, ha afirmado tajante. Y después ha puesto un ejemplo más cercano: “Para qué sirven las primarias en esta misma región, en algún partido, si luego se denuncian entre ellos, y si resulta que en la misma casa había treinta o cuarenta afiliados del partido, y resulta que no vivían en esa casa sino que era la oficina de uno de los candidatos... Un galimatías tremendo”, ha explicado Garre. A renglón seguido, Alberto Garre ha afirmado que “en todas partes cuecen habas” y que respeta las fórmulas de todos los partidos, pero que el PP tiene su modelo y que hasta el momento no les ha ido mal.
Sin respuesta a su posible candidatura
El presidente de la Región de Murcia tampoco ha querido aclarar si quiere ser el candidato del PP en las elecciones autonómicas, asunto que por los referidos estatutos de su partido, se decidirá en Madrid. Y ello lo ha dicho teniendo a metro y medio a otro aspirante, el consejero de Educación Pedro Antonio Sánchez, a quien el presidente del PP regional, Ramón Luis Valcárcel, ha señalado como su preferido. Sobre si existe buena comunicación entre él y Valcárcel, Garre se ha adelantado a afirmar que la sintonía es “total” y ha negado cualquier tipo de dicotomía. Al ser preguntado si conoce a otros candidatos que pudieran ser mejores que él mismo para dirigir el Gobierno de la Región de Murcia, Alberto Garre ha afirmado que “montones”, aunque al final será el partido el que decida.