Sánchez Serna ha visitado Lorca “para conocer de mano de sus vecinos algunas de las problemáticas que tiene el municipio, así como mostrar las propuestas de Podemos para rescatar a la ciudadanía de esta situación”, según dicho partido.
El candidato, acompañado por el secretario general de Podemos en Lorca, Francisco J. Campos, se ha reunido con los afectados por las riadas de Lorca, que cuatro años después de la catástrofe siguen sin recibir las ayudas prometidas, tal y como ha explicado Podemos.
“Estos vecinos le han trasladado a Sánchez Serna su descontento con la Administración, que ha permitido la edificación de viviendas y naves cuando estas zonas son sitios donde pasan ramblas, y de alto peligro de inundaciones”, relata Podemos. El partido de los círculos afirma que han podido conocer de primera mano el problema de las “urbanizaciones fantasma, viendo como se han hecho grandes construcciones de viviendas, cerradas, y que el Ayuntamiento de Lorca ha tenido que indemnizar a los constructores y promotores con 16 millones de euros que finalmente saldrán de las arcas publicas”.
Sánchez Serna ha explicado que se trata de un nuevo caso en el que “la ciudadanía tiene que pagar las perdidas de la mala gestión de las administraciones publicas”.
Durante la visita ha Lorca, el candidato ha podido observar la existencia de “edificios en ruinas y con alto riesgo de peligrosidad para los vecinos y viandantes, que sin embargo siguen en pie sin que nadie haga nada para evitar posibles daños”. Como ejemplo, Podemos ha señalado el edificio de la céntrica Avenida de Portugal.
Más tarde, Javier Sánchez ha visitado a comerciantes y vecinos del centro de Lorca, y les ha explicado las iniciativas de apoyo a las PYMES y al pequeño comercio. Por último, el candidato ha resumido ante los medios las propuestas de Podemos para el municipio de Lorca, “que pasan por llevar a cabo medidas de rescate ciudadano, donde lo importante sea cubrir las necesidades básicas de la población como la vivienda, y donde la política de transparencia sea una realidad para evitar que sean los ciudadanos los que tengan que pagar la caída de la burbuja inmobiliaria”.