Rajoy, de luto en Murcia
A pesar de los 12 grados de temperatura, se respira Navidad en Murcia: los suelos de las calles comerciales brillan con purpurina, la gente canta villancicos alrededor del inmenso árbol de Navidad de la Redonda. En el pequeño Pabellón José María Cagigal, en cambio, se cancela el mitin del Partido Popular que iba a clausurar Mariano Rajoy.
“Hay 400 personas esperando en la calle”, señala Julia, quien se extraña de que el PP haya elegido un recinto tan pequeño mientras centenares de personas esperan en la calle. Sin melodías del PP en versión rock o jazz, Rajoy entra al Pabellón donde se reúnen alrededor de mil asistentes. “Es emocionante, es hermoso y estoy convencido de que los españoles nos van a ayudar. Hoy teníamos un acto magnífico y hay mucha gente fuera. He intentado saludarlas a todas, e incluso me he hecho algunos selfies, pero no ha sido posible”.
El presidente de Gobierno expresó su “pesar” por el policía nacional fallecido en el ataque a la Embajada española en Kabul y agradeció a las fuerzas de seguridad del Estado su labor. “No se puede celebrar este acto”, explica Rajoy ante el auditorio.
Los asistentes al mitin no terminan de abandonar el recinto, con las camisetas azules de la formación política que han recibido de regalo colgando tristes de sus manos, y con la pegatina de la bandera española pegada en la solapa con el lema escrito debajo: “En serio”.
Alba, estudiante de 18 años de Políticas, está muy decepcionada. Su padre obrero y su madre carpintera han encontrado trabajo recientemente y atribuye esta mejoría a la pericia de Rajoy. Pero Alba es una de las pocas jóvenes en un auditorio poblado de cabellos grises y teñidos de rubios.
Consuelo, ama de casa de 57 años, abunda en la misma idea: “Rajoy nos ha sacado del hoyo”. Poco a poco se vacía el pabellón mudo, sin palabras, pero las cámaras sí que han recogido cómo Rajoy se hacía 'selfies' y besaba a los niños en la puerta. Mañana el líder del PP retomará la campaña. No se decretará luto.