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Podemos recurrirá al Constitucional si se confirma la sanción del parlamento murciano a uno de sus diputados

La diputada de Podemos María Marín

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Podemos ha anunciado que evitará por todos los medios posibles la sanción propuesta a uno de sus diputados en la Asamblea de la Región de Murcia, Víctor Egío, que se enfrenta a permanecer un mes apartado de sus funciones tras negarse a abandonar el pleno del parlamento. De confirmarse la sanción presentarán un recurso de amparo al Tribunal Constitucional. Los hechos se remontan a hace dos semanas. Tal y como describe la formación, “tras recibir una serie de injurias personales y bulos de parte del portavoz de Vox por disfrutar de un permiso de paternidad de seis semanas”, Egío pidió su turno a réplica por alusiones personales. La Presidenta de la Cámara Visitación Martínez (PP), no se lo concedió.

La presidenta suspendió la sesión tras la negativa del diputado de Podemos de abandonar el hemiciclo. Poco más de una semana después, la Comisión del Estatuto del Diputado del Parlamento autonómico ha considerado, por mayoría, que Egío incurrió en infracciones de “gravedad suficiente” para que puedan ser constitutivas “de una conducta sancionable”: “Las votaciones no pueden interrumpirse por causa alguna”, ha reprochado un comunicado emitido por la Asamblea.

“A lo largo de todo este proceso se han violado las mínimas garantías exigibles en un Parlamento democrático”, ha sostenido la diputada María Marín. Desde Podemos han defendido que Egío solicitó “su legítimo turno a réplica” amparándose en el artículo 93 del reglamento de la Cámara. Este manual de conducta especifica tiempos de palabra para ciertos supuestos, como en el caso de que “se hicieran alusiones que impliquen juicios de valor o inexactitudes en relación con la persona o conducta de una diputada o diputado o de un grupo parlamentario”. En situaciones así se estipula que será la Presidenta de la Cámara quien “concederá a la aludida o aludido o al diputado o diputada portavoz del grupo parlamentario la palabra por tiempo no superior a tres minutos para que, sin entrar en el fondo del asunto en debate, conteste estrictamente a las alusiones”.

“Los que proponen y aprueban el dictamen para sancionar a nuestro compañero son ni más ni menos que el portavoz de Vox que lo insultó y la presidenta de la Asamblea, que no le dejó defenderse –ha continuado Marín-. Ellos se lo guisan y ellos se lo comen”. Según ella, se trata de “un juicio sumarísimo”: “No se nos permite presentar testigos ni ningún tipo de recurso, un proceso inquisitorial más propio de la Edad Media que de una democracia moderna”.

La portavoz morada ha anunciado que, si la Asamblea confirma la sanción, Podemos presentará “de forma inmediata” un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional “denunciando este proceso viciado desde el principio”. “Vamos a presentar este recurso por la suspensión de nuestro compañero –ha explicado Marín-, pero ante todo porque ha llegado el momento de pararle los pies a una ultraderecha desatada, a la que el Partido Popular le ha puesto una alfombra roja y le ha dado barra libre en la Asamblea”.

La diputada ha hecho balance: “Hace dos semanas era Víctor Egío el que sufría sus bulos y sus ataques por disfrutar un permiso de paternidad. El miércoles pasado se referían a los compañeros socialistas como una banda mafiosa. Es una escalada que no va a parar aquí, que va a ir en aumento, porque es lo único que cabe esperar cuando la presidenta de la Asamblea premia al acosador y castiga a la víctima”. Al respecto, ha señalado que la sanción que propone la presidenta de la Asamblea, apoyada por el Partido Popular, “envía una señal muy clara para que vuelvan a hacerlo, porque ellos les van a dar cobertura a estos ultras”.

La diputada ha denunciado que este no es “un caso aislado”. Ha recordado que, en esta legislatura, el Partido Popular redujo a la mitad el tiempo de las intervenciones del grupo mixto, donde se encuentra Podemos, y que se han suprimido los plenos de control a los consejeros para evitar, según ella, “preguntas incómodas”. “Y ahora proponen suspender por primera vez en la historia de la Cámara a un diputado, también de Podemos, el compañero Víctor Egío que solo quería defender su derecho a un permiso de paternidad frente a los bulos de la ultraderecha”, ha expuesto. Marín considera que “son demasiadas coincidencias para no pensar que nos atacan por ser de Podemos”.

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