El pamplonica Óscar Urralburu (1971) se juega mucho en las elecciones del 10N. Hace unas semanas, abandonó su escaño como diputado en la Asamblea Regional por Podemos, además de los cargos orgánicos del partido, para liderar la candidatura de Más País-Equo al Congreso de los Diputados por la Región de Murcia. Asegura que lo hizo por “coherencia política”, al no apoyar el proyecto de Pablo Iglesias.
Urralburu expresa que dio el paso con “mucha ilusión y el inmenso y generoso apoyo” de los casi 300 voluntarios y voluntarias que se están “dejando la piel para sumar escaños para Más País”. Sostiene que su formación tiene “algo que decir en la nueva investidura o vamos a terceras elecciones”.
El colapso del Mar Menor ha provocado una indignación más palpable entre los murcianos, ¿pero cree que lo suficiente como para que se traslade el voto a un partido como Más País que ha hecho del medio ambiente una de sus principales banderas?
El Mar Menor lleva siendo un eje principal de la política regional desde que en 2015 abrimos aquella Comisión Especial en la Asamblea Regional. Fuimos nosotros, de la mano de la sociedad civil, los que lo pusimos en primera línea política y los que hemos trabajado intensamente para evitar que pasara lo que ha pasado. Sinceramente, no veo el Mar Menor como un elemento a exprimir para sacar rentabilidad política sino una de las principales tareas del próximo gobierno progresista en España, porque esto sólo lo resuelve un gobierno que sepa de verdad lo que nos estamos jugando.
La laguna no es el único problema grave medioambiental de la Región: ¿cuáles son sus prioridades a este respecto?
La principal actuación debe ser la responsabilidad. Eso significa poner en marcha un gobierno en la Moncloa, sin más demoras ni bloqueos, que presupueste una adecuada dotación para salvar el Mar Menor desde el minuto uno de la legislatura. Eliminar la aportación de nutrientes que provocan la eutrofización, cumplir la ley de medidas urgentes, actualizar el Plan de Vertido Cero para controlar todas las aportaciones a la laguna,supervisar la publicación de una Ley Integral de usos en el Mar Menor que implique al sector agrario legal en la corresponsabilidad y que la hoja de ruta la escriban los expertos y no los políticos teledirigidos por los intereses privados, en definitiva, la aplicación de todas las medidas de protección ya existentes y que hasta ahora han sido obviadas.
Las últimas encuestas publicadas coincidían en que Más País no iba a sacar un número suficiente de escaños como para formar grupo parlamentario propio en el Congreso, ¿considera que van a obtener más apoyos entre el 30% del voto indeciso?
A ellos estamos dirigiendo toda la campaña. A los indecisos y a quienes han decidido abstenerse, hastiados por la irresponsabilidad de quienes han provocado la repetición electoral y han dado una segunda oportunidad a la ultraderecha. A todo ese bloque que se siente huérfano entre tantas opciones políticas y que es crítico para alcanzar una mayoría de progreso y de desbloqueo. Esta campaña he señalado que una abstención alta nos lleva al desastre a los sectores progresistas y deja el país en manos de la ultraderecha. No podemos permitir que ocurra.
La encuesta de GAD3 publicada por La Verdad hace unos días señalaba que el escaño de UP ahora se encuentra disputado entre esta formación y el PSOE. ¿Cree que Errejón se equivocó al plantear una candidatura en la Región?
Si pensara eso nunca habría dado el paso de encabezar esta candidatura. La realidad es que en la circunscripción de Murcia se reparten 10 escaños que no tienen dueño, son propiedad de los murcianos y las murcianas que eligen libremente. La clave está en que los irresponsables que nos han traído hasta aquí deben de hacer autocrítica y valorar si una repetición electoral no es en sí misma un error, si pensaban que nadie se iba a mover mientras ellos le extendían la alfombra roja a la extrema derecha están muy equivocados.
En cualquier caso, lo que las encuestas dibujan es un escenario de alta volatilidad, con mucha gente que no ha decidido ni su voto, ni si va a votar y nosotros estamos aquí para asegurar que ningún voto se queda por el camino y que todos y cada uno de ellos contribuyen a construir un gobierno progresista. Entre el 20D del 2015 y el 26J de 2016, con la repetición electoral, decenas de miles de votantes en la región que habían votado a opciones progresistas se quedaron en casa. No sólo de Podemos e IU, también del PSOE. Más de un millón en el conjunto del país. Una abstención fruto que trajo de nuevo un gobierno del PP. Es lo que no puede volver a ocurrir. Más País no viene a dividir la izquierda sino a movilizar al electorado progresista y a lograr sumar nuevos escaños para desbloquear la situación y lograr conformar un gobierno.
Hasta hace poco tiempo lideraba Podemos en la Región. ¿Cómo ha sido afrontar una campaña electoral en un partido nuevo en tan pocas semanas?
No podemos estar más agradecidos a toda la gente que se ha desvivido durante estas semanas por organizar los actos, repartir el material, publicar en redes sociales para que esta candidatura tenga el mayor apoyo posible el próximo 10N. Algunos vienen de Podemos, otros lo habían dejado hace tiempo, y para unos cuantos Más País es su primera incursión en la arena política, lo que da mucha frescura a la campaña. Sin duda Más País tiene mucho futuro en la región.
¿Qué aporta el programa de MP a la Región?
El acuerdo verde que proponemos para todo el país es especialmente beneficioso para la Región de Murcia. Crear empleo de calidad apostando por las energías limpias en el territorio con más horas de sol de toda Europa es muy importante. Adaptarnos al cambio climático es vital en una Región que tiene mucho que perder si sigue arrastrando los pies en este tema y haciendo como si no ocurriera nada. Además, cuando en España hablamos de la necesidad de cambiar el modelo productivo, señalando que no podemos basar nuestro futuro en cañas baratas y el ladrillo, hablamos de modo especial de la región, de la necesidad de abordar un proceso de reindustrialización verde que abarate la producción energética y con ello reduzca los costes energéticos de toda producción industrial, que resulte más competitiva por la mejora de los procesos y no por la bajada de los salarios. La región necesita ampliar su producción industrial, adaptar los procesos para hacer sostenible y compatible con el medioambiente la agroindustria y tiene que enfocarse hacia otro tipo de turismo, mucho más competitivo. Debemos mejorar notablemente nuestros productos, para lo que resulta fundamental el apoyo del estado.
¿Qué creen que aportan ustedes y, particularmente usted y María Giménez con la experiencia parlamentaria de la última legislatura, a Más País?
Llevamos poco tiempo en política pero no partimos de cero y considero que tenemos una experiencia muy rica que podemos trasladar al Congreso de los diputados. No cabe duda que nuestra experiencia durante estos últimos 4 años nos ha enriquecido como personas y nos ha hecho mejores representantes políticos. Conocemos muy bien la región de Murcia, sabemos identificar sus puntos fuertes y sus debilidades, sabemos qué es lo que necesita. Por otro lado, sabemos alcanzar acuerdos y lo hemos demostrado en los últimos cuatro años, y precisamente esto es lo que necesita nuestro país en este momento: conocimiento y responsabilidad, capacidad de alcanzar acuerdos entre diferentes. Saber qué es lo más importante para nuestro país y para nuestra región, poniendo siempre las necesidades de la gente por delante de las necesidades particulares de los partidos.
¿Comparte los temores de que se vuelva a repetir un bloqueo para formar Gobierno? Las perspectivas por el momento no son muy halagüeñas.
No cabe duda de que si hacemos lo mismo que en abril no podemos esperar resultados diferentes. Cuando vi el debate me dio la sensación de que el gobierno progresista estaba más lejos que nunca. Y esta es una sensación que tiene mucha gente. Es como si Pedro Sánchez y Pablo Iglesias hubieran tomado la decisión de dar ventaja a las derechas para que sumen y puedan gobernar España, porque en campaña se pelean pero sabemos que en cuanto tienen oportunidad llegan a un acuerdo. Como han hecho en Andalucía, en la Comunidad de Madrid o la región de Murcia. Hoy mismo, en el campus de Espinardo he preguntado a un operario cómo veía la situación y me ha certificado que no tenía esperanza en que hubiera gobierno, que después de ver el debate estaba convencido de que íbamos a una tercera vuelta, algo que me resulta insoportable de pensar. Por eso no es broma cuando decimos que o Más País tiene algo que decir en la nueva investidura o vamos a terceras elecciones, que hacemos más falta que nunca, que no puede haber nada más revolucionario que ser responsable y comprometerse con garantizar un gobierno progresista y estable en España que nos permita avanzar en la toma de decisiones que son vitales para nuestro país.
¿Cuáles serían las principales medidas educativas más urgentes que adoptar en la Región?
Hace falta invertir más y mejor en la Educación Pública. Como sabes tras renunciar a mi escaño he vuelto a mi centro y lo encuentro en las mismas condiciones en las que lo dejé cuando me fui. Nada ha cambiado, y por tanto hemos perdido cuatro años y medio. Hemos perdido la posibilidad de mejorar en infraestructuras, en calidad educativa, en recursos informáticos y educativos, etc. Por eso los resultados no mejoran de un año para otro, porque no se invierte nada para mejorar el sistema educativo público, sólo se ha invertido en mejorar la red concertada. Y este desgaste pasa factura al conjunto del sistema. Hay que prestar una educación más personalizada, para ello hay que ampliar las aulas, reducir las ratios por grupo, contratar más profesorado y darles más tiempo para que puedan trabajar de modo personalizado sobre el alumnado, hay que hacer gratuita la enseñanza pública en el tramo 0-3 para mejorar las políticas de conciliación y prevenir el fracaso escolar, es vital mejorar la formación profesional y darle una mejor consideración al bachillerato. El margen de mejora es enorme en la enseñanza pública.
Vox está liderando la radicalización de la sociedad en contra de la igualdad de género, del colectivo LGTBI y los inmigrantes. ¿Por qué cree que está sucediendo en estos momentos y cómo proponen ustedes contrarrestar esa situación?
Por un lado el crecimiento de la ultraderecha es un fenómeno europeo del que España no se iba a salvar por arte de magia. El feminismo es el movimiento político más importante de nuestra era y aunque va viento en popa es imposible pensar que no fuera a despertar una reacción frente al cambio. Vox es eso, una reacción de odio y miedo ante la igualdad entre los hombres y las mujeres y la libertad a la hora de declarar la libre orientación sexual. Vox es la reacción ultra frente al avance de la libertad y la igualdad. Pero no podemos obviar que la situación catalana tiene mucho que ver en su éxito: desde las andaluzas del año pasado, la cuestión catalana, la sentencia del Procés y los disturbios posteriores han resultado ser la gasolina que ha alimentado fuego. Otra de las razones por las que hemos de señalar lo inoportuno de esta repetición electoral que va a dar alas a la ultraderecha.
Ante las mentiras de los autoritarios, los xenófobos y los machistas ya te digo que nosotros no nos vamos a quedar calladitos como hicieron Sánchez e Iglesias en el debate del lunes. Vamos a confrontar defendiendo la igualdad, la libertad y la democracia.
¿Cuál ha sido el descubrimiento personal más importante de entrar en política?
Que como en la vida, la falta de honestidad pone en riesgo todo el conjunto de la vida social e institucional. Y que precisamente por ello debemos ser muy exigentes con el comportamiento de quienes quieren representar a la ciudadanía, porque existe el riesgo de que las instituciones de la democracia dejen de ser instrumentos de servicio público y se conviertan en mecanismos de enriquecimiento personal o de generación de privilegios para unos pocos. Hemos de ser conscientes de que o hacemos nosotros la política o nos la hacen quienes no han hecho otra cosa en su vida, quienes llevan toda la vida viviendo del cuento, del partido o de las subvenciones al partido, y sirviendo a los intereses de otros. Necesitamos en política personas capaces, independientes y socialmente sensibles. Sobran trepas y sinvergüenzas.