La Plataforma por la Recuperación de la Línea 61 ha expresado su decepción por la “falta de sensibilidad” del Gobierno regional y, en concreto, del director general de Transporte, José Ramón Diez de Revenga, con el que se reunió ayer y que literalmente le dijo a los asistentes al encuentro que “no iba a poner una línea para cuatro vecinos, ni un autobús para cada vecino en su puerta”.
El objetivo de la reunión era trasladarle a la Comunidad Autónoma el acuerdo del Pleno del Ayuntamiento de Murcia que, a propuesta de los cuatro grupos de la oposición y por unanimidad, se comprometió a financiar con 200.000 euros del presupuesto de 2018 la restitución del servicio, “lo que se estima es la mitad del déficit anual de esta línea”.
Los vecinos y vecinas han explicado que la línea 18, que sustituye a la 61 desde su eliminación en 2012, no cubre las necesidades de los residentes en San José de la Montaña, El Palmar, San Ginés y Aljucer, “especialmente de las personas mayores o en situación de dependencia que necesitan acercarse al centro o los hospitales de referencia para recibir asistencia sanitaria”.
En este sentido, cuando se le trasladó que algunos vecinos y vecinas tienen que atravesar el pueblo entero de Aljucer para llegar a la parada de la carretera de El Palmar, Diez de Revenga contestó “que cogieran un taxi”.
A pesar de eso, la Plataforma le trasladó a Díez de Revenga que está “abierta a posibles soluciones como una reestructuración de la 18 para que todas las expediciones lleguen a Murcia y no solo cinco diarias como sucede entre semana”.
Ambas líneas, como todas las que unen las pedanías, son de titularidad regional, por lo que debe ser la Comunidad Autónoma la que modifique el contrato con la empresa concesionaria del transporte público, Autobuses LAT.
La Plataforma Vecinal por la Recuperación de la Línea 61 de Autobús está compuesta por residentes en las pedanías de Aljucer, El Palmar y San Ginés. El pasado 8 de junio convocó el 8 de junio una manifestación que contó con el apoyo de una veintena de colectivos, formaciones políticas y asociaciones.
José Enrique Saura, miembro de la Plataforma, quien relató “el drama” que viven diariamente los vecinos y vecinas de las zonas afectadas desde que el Gobierno regional suprimiera en 2012 esta y otras líneas que conectan el sur, especialmente los lugares más rurales, con el centro del municipio.
Asimismo, la Plataforma cuenta con el respaldo del comité de empresa de Autobuses LAT. Su presidente, Francisco Frutos, recordó que los trabajadores ya manifestaron su desacuerdo con la reestructuración. Este ajuste trajo consigo 50 despidos y recortes en todas las líneas, es decir, “más precariedad” en el servicio de transporte público que opera en el municipio.
“Han dejado a poblaciones completamente aisladas”, sostuvo Frutos, para quien las demandas a favor de la recuperación de la línea 61 son “más que justas”.