Lo que iba a ser una acampada de protesta de una semana -desde el 5 de septiembre hasta la romería de la virgen de la Fuensanta- acaba de cumplir 200 días seguidos de protestas en el paso a nivel de Santiago El Mayor en Murcia con el fin de que el AVE llegue soterrado.
Si los primeros 100 días estuvieron marcados por las protestas de los vecinos, una manifestación masiva de 50.000 personas, episodios violentos aislados y el comienzo de las obras, la segunda parte ha destacado por la represión puesta en marcha por el nuevo delegado del Gobierno, Francisco Bernabé, y la construcción de la pasarela para atravesar el muro del AVE que los vecinos tendrán que utilizar “temporalmente” hasta que se soterre.
“Esto es criminal”, dice María González, una jubilada de 67 años. “A los mayores nos quieren arrinconar y a mí me gusta mucho la calle a pesar de mi edad. Ya no voy a poder ir al mercado o la droguería que están ahí”. Señala hacia el otro lado de las vías cargando con sus bolsas de la compra. “Me da miedo y claustrofobia subirme en el ascensor a esa pasarela. Y a los más jóvenes también, ¿eh?”, añade.
En el cruce del paso a nivel una mujer con un carrito de bebé, tres mujeres con el carrito de la compra y otra mujer en silla de ruedas se agolpan a la espera de que la señal deje de estar en rojo mientras cruza un Altaria en dirección a Madrid. Todas ellas tendrían que coger el ascensor y atravesar la pasarela de siete metros de altura para cruzar al otro lado. Son ya más de 90 trenes los que pasan por dicha vía, a la espera de que se sumen el AVE y el Corredor Mediterráneo.
Hay dos policías nacionales vigilando el cruce y otros dos guardianes de seguridad apostados bajo la pasarela en construcción. Atención, no cruce, dice la señal luminosa. Si fuera de noche durante una de las concentraciones diarias, los vecinos pitarían y gritarían al tren que pasa.
La Plataforma Pro Soterramiento lleva ya 29 años luchando para soterrar la vía del tren que dificulta la movilidad de 100.000 vecinos que viven en el sur, la zona más pobre de la ciudad. La plataforma reclama que el tren de alta velocidad se quede en Beniel, donde hay una estación nueva construida, y entre en la capital de la Región soterrado, tal y como se acordó en el convenio firmado en 2006, cuando se iban a soterrar ocho kilómetros.
Con la crisis el acuerdo se disolvió. En 2012, en cambio, llegó la idea del AVE con la ministra de Fomento Ana Pastor y el expresidente Ramón Luis Valcárcel, mientras que la idea del soterramiento quedaba aplazada sine die.
Finalmente, la presión de la plataforma y los vecinos, que vivieron un revulsivo con la respuesta policial a las protestas que acompañaron la visita del ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, a mediados de septiembre, ha conseguido el compromiso de que se soterren 1.113 metros en un periodo de cuatro años con un coste de 600 millones de euros. Mientras tanto, se construirá un muro de metacrilato de 5 metros de alto y 9 kilómetros de largo, muy cerca de las viviendas.
Pero los vecinos han oído todo tipo de promesas durante estas tres décadas de espera y se muestran muy desconfiados. “¿Tú te crees que van a hacer el soterramiento después de invertir tanto dinero en esto? Yo creo que no”, dice María. “Bastante nos han mareado ya. Además, no entiendo las prisas y la necesidad de que llegue el AVE, la verdad”, añade la jubilada.
Desde eldiario.es repasamos los acontecimientos que han marcado esta lucha vecinal durante los últimos 100 días de protestas.
Tensión tras la llegada de Francisco Bernabé
A mitad de noviembre del pasado año se nombró a un nuevo delegado de Gobierno en Murcia, Francisco Bernabé, quien había alcanzado la notoriedad en el Congreso con “el efecto látigo” de la cola de los perros. Con él se agudizó la actuación policial en las vías: a finales de enero hubo tres detenciones por actos vandálicos, que Bernabé no dudó en vincular a la lucha pacífica de la Plataforma Pro Soterramiento.
El pasado 3 de febrero una concentración sumó miles de personas ante la Delegación de Gobierno para pedir la dimisión de Bernabé “por el uso partidista de las instituciones”. A los pocos días el consejero de Turismo, Cultura y Medio Ambiente de la Comunidad, Javier Celdrán, comparó un altercado en las obras del AVE con los atentados de ETA en su cuenta de Twitter.
Crowdfunding para las multas
La Plataforma Pro Soterramiento puso en marcha a finales de febrero un crowdfunding para recaudar 30.000 euros con el objetivo de pagar multas impuestas a los vecinos del barrio del Carmen por Delegación de Gobierno.
“Después de que Francisco Bernabé se haya estado ufanando en los medios de que quien la hace la paga, los vecinos del barrio han recibido hasta 36 multas que se retrotraen al 3 de octubre, así que seguramente llegarán más”, dice a este medio Joaquín Contreras, portavoz de la Plataforma.
Y así fue. Por ejemplo, entre esas multas no están contabilizadas las cuatro recibidas por Sandra Martínez, una trabajadora social de 30 años, que ascienden a más de 2.000 euros. “Una me la pusieron en las vías, pero las otras tres me llegaron por aparecer en imágenes de una cámara, decían. Además tengo una denuncia por agredir a un policía justo cuando les puse un parte en el hospital por las heridas que me habían causado ellos”, cuenta Sandra.
Una acequia bajo la pasarela del AVE
La seguridad de las obras de la pasarela peatonal del AVE se puso bajo interrogante cuando la Plataforma Pro Soterramiento señaló la existencia de una acequia próxima a las zapatas que sustentan la estructura y que no había sido registrada por Adif, la empresa encargada de llevar la vía de alta velocidad hasta Murcia.
Joaquín Contreras entregó un escrito a la Fiscalía el 3 de marzo en el que lo denunciaba. Previamente, ya se había interpuesto una denuncia en la Audiencia Nacional al considerar que el proyecto para el soterramiento carece de la memoria de impacto ambiental obligatoria.
El 8M choca contra un muro policial
El 8M, además de movilizar a 100.000 murcianos en una manifestación histórica, terminó con un herido grave y varias detenciones cuando la concentración se adentró en el barrio en el barrio de El Carmen para terminar en el paso a nivel de Santiago el Mayor, donde más cien agentes y decenas de furgones policiales estaban a la espera.
El movimiento feminista de Murcia quiso solidarizarse con las mujeres de las vías y apostar por una ciudad sin muros. Los cánticos feministas se fusionaron con proclamas pro soterramiento, ('Nosotras por arriba, el tren por abajo'), criticando la represión y violencia policial como elemento del patriarcado.
Subfusiles en las vías del AVE al levantar la pasarela
El pasado 15 de marzo el paso a nivel de las vías de Santiago El Mayor amaneció con la Policía Nacional con subfusiles en mano, mientras niños y jóvenes se dirigían al colegio y al instituto. Después del revuelo que se originó en las redes sociales, los agentes retiraron las armas al cabo de unas horas.
Pero como los vecinos habían supuesto, la siguiente madrugada comenzaron las obras de la pasarela peatonal que atravesará el muro de las vías del AVE de madrugada por Aldesa, empresa citada como donante en los papeles de Bárcenas e implicada en sobrecostes millonarios en la Alta Velocidad Española, Adif.
Nuevo frente judicial para parar las obras del AVE
El 16 de marzo el Colectivo Jurídico Las Vías informó de que habían impugnado también en la Audiencia Nacional las obras de llegada del AVE en superficie en Murcia. El colectivo esgrimió la inexistencia de una Declaración de Impacto Ambiental (DIA) para realizar las obras, la que está siendo utilizada perdió su vigencia, de modo que sería ilegal, así como la vulneración de los Derechos Fundamentales de Inviolabilidad del Domicilio y el Derecho a la Vida y a la Salud.
Adif miente a la UE
El pasado 22 de marzo el periódico digital El Independiente informó de que Adif había mentido a la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo al señalar en un informe relativo a las obras de accesos de Murcia que no se trataba de “una nueva línea”.
El motivo sería que con una línea nueva Adif se vería obligada a hacer una modificación que dilataría las obras e impediría que el AVE llegara antes de las elecciones municipales y autonómicas de 2019.
El PP lleva en el Gobierno de la Región desde 1995 y teme perder el poder por contar con ocho causas de corrupción abiertas en los juzgados de la Región, entre ellas una de las que obligó a dimitir el año pasado al expresidente Pedro Antonio Sánchez, y, por otra parte, por la inoperatividad de sus sucesivos mandatos, durante los cuales muchas obras de infraestructuras no se llegaron a concluir. La llegada del AVE se vendería como la medida estrella del PP antes de las elecciones.
De hecho, el PP dio por finiquitada la Comisión de Seguimiento del AVE de la Asamblea Regional, en la que están representados todos los partidos y los agentes relacionados con el tema. Ni Francisco Bernabé, ni Juan Bravo, presidente de Adif, ni Julio Gómez Pomar, secretario de Estado de Infraestructuras y presidente de Murcia, comparecieron en la Comisión.