“No quiero dinero ni que le pongan multas, pero sí que se arrepienta y pida perdón”, dijo Jesús Costa Gómez, presidente del colectivo No te prives, en referencia al acto de conciliación que tendrá lugar el próximo martes en la Ciudad de Justicia con José Luis Mendoza por sus declaraciones homófobas en el acto de apertura del curso 2015/16 de la Universidad Católica. En caso de que Mendoza no vaya a la citación judicial, están dispuestos a poner una querella.
“Las palabras de Mendoza incitan al odio. Cada uno puede tener su opinión, pero no puede manifestarse así en un acto la inauguración de un curso escolar de una universidad acompañado por el presidente de la Región Pedro Antonio Sánchez”, señaló Costa. “No se trata de creencias religiosas, sino de respeto a los derechos humanos. Para mí es una humillación”, añadió.
José Luis Mendoza afirmó en aquella ocasión que “el matrimonio igualitario es una abominacioÌn ante los ojos de Dios”. Desde el colectivo No te prives señalan que no es la uÌnica vez que Jose Luis Mendoza pone de manifiesto una opinión homófoba y añaden que llevarán al juzgado “declaraciones y entrevistas de radio y prensa escrita, asiÌ como en entrevistas televisivas y artiÌculos en libros en las que sin miedo alguno ni respeto por la diversidad de orientacioÌn sexual”.
“Es necesario recordar que el matrimonio igualitario es un derecho reconocido legalmente en este paiÌs, resultado de una lucha de años por los derechos del colectivo LGTB -Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales- y que ha sido ratificado por el Tribunal Constitucional”, afirma el colectivo.
“Frases como que las relaciones entre homosexuales son actos antinatura son habituales en su lenguaje cotidiano y hacen daño al arduo trabajo de convivencia entre iguales que durante tanto tiempo se estaÌ llevando a cabo por parte de este colectivo”, subraya el colectivo respecto a Mendoza.
“En un momento en el que estaÌn aumentando las agresiones a personas LGBT consideramos muy grave y denunciable esta actitud”, concluyen desde el colectivo. “Imagina también cómo se deben sentir los estudiantes homosexuales que estudian en esa Universidad”, reflexiona Costa Gómez.